lunes, 27 de noviembre de 2006



Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera


Sé mi amigo


Es un regalo de la vida contar con buenos amigos. No encuentro medio más valioso para honrar su memoria que mejorar mis pasos de cada día con su ejemplo, con su huella en la tierra. Un día como hoy partió de este mundo después de vivir en él 47 años un hombre que vivió lo que escribió cuando dijo:

No camines delante de mí, no te seguiré.
No camines detrás de mi no te conduciré.
Camina junto a mí, solamente, y sé mi amigo.


Este hombre hizo de su lealtad a su verdad y al espíritu de libertad la divisa de su intensa vida que ardió con tal fuerza que su resplandor y aliento me siguen acompañando.

-Inspirado en Albert Camus (1913-1960)

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Alimentos

En un viejo camino donde termina el desierto y comienzan los Himalayas, quienes ascienden a las montañas sagradas, tienen por costumbre, dejar un poco de alimento en la orilla del camino -protegido por unas cuantas piedras- para quienes vienen detrás y también algún breve mensaje para acompañar en la ruta. Uno de esos caminantes dejó esta pequeña nota:

Recordar y no olvidar.
Vivir en el mundo sin apegarse al polvo del mundo
Si presencias buenas acciones de otro, imítalas
Si presencias acciones equivocadas, pásalas por alto
Aunque estés sólo en una habitación oscura,
compórtate como si estuvieras
ante el más valioso y querido de tus huéspedes.
Exterioriza tus sentimientos
pero que ellos no sean más expresivos
que tu propia naturaleza
.

-Inspirado en Zengetsu

martes, 21 de noviembre de 2006





Cartas del Desierto


Guillermo Pareja Herrera

Los cuentos y mi piel


Pienso en mi madre.Mi madre la mujer que me contaba cuentos estando despierto, para despertar a la vida y estando dormido para despertar a la tarea cotidiana.Igual pasaba de Rojín y Verdín, dos gorrioncitos que aprendían a volar, que al Corderito de un párroco en un pueblo de la campiña francesa. De ahí viene mi amor por escuchar cuentos, leer cuentos y contar cuentos.Eso que llaman la historia humana está hecha de una galaxia de galaxias de millones de estrellas las cuales contienen infinitos cuentos.Los cuentos eran repetidos por mi madre como la mujer que echa la semilla al boleo en el campo abonado.Los cuentos, como las semillas echadas al viento son minúsculos fragmentos que caen donde tienen que caer y cuando tienen que caer. Los cuentos están destinados a dar frutos que, por igual, iluminan una porción de la vida o producen un cambio de piel completo, como me ha sucedido varias veces a lo largo del laberinto de mi vida.Los cuentos de mi madre, sin olvidar lo cuentos de mi padre, me llevaron,a menudo, por caminos sin trillar,a conclusiones diferentes de lo esperado porque la vida que vivimos en casa tuvo la rara cualidad de ser imprevisible. Los cuentos fueron el espejo de nuestros asombros familiares y nuestros asombros se convirtieron en cuentos improvisados como el apasionado y turbulento De Panca en Panca -la interminable escalada de un niño africano a un árbol de tamaño colosal, que haría palidecer a cualquier otro libro de aventuras de la época-.
¡Ay, de los niños de este tiempo que no tienen quien les cuente un cuento que les haga sentirse amados en el instante de cerrar los ojos.!


Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Laika


Laika se llamó el primer ser vivo enviado al espacio extraterrestre. Fue una perrita de 13 libras de peso y tres años de edad aproximadamente. Su viaje lo realizó a bordo del cohete ruso Sputnik II, el día 3 de noviembre de 1957. Llevó puestos varios sensores para registrar datos fisiológicos que ayudarían para el envío de seres vivos humanos, como fue el caso de Yuri Gagarin el primer cosmonauta.El mundo quedó asombrado por este envío y su pasajera, cuyo nombre significa en ruso Ladradora, y su perfil recuerda al grupo Husky.Laika giró alrededor de nuestro pequeño planeta durante 10 días antes de que fuera puesta a dormir para siempre, porque no se contaba con mecanismo para que retornara a tierra sana y salva. Yo fui un niño de 8 años, entre millones, que se asombró por ese suceso y, desde entonces, se acrecentó mi amor y cuidado de los seres vivos.No he dejado de preguntarme ¿Laika, cómo viste a la humanidad desde esas alturas? ¿Ha valido la pena tu sacrificio para la convivencia pacífica entre los humanos y con todos los seres vivos? Querida Laika, tú nos enseñaste a que aspiremos a lo bueno, a lo mejor y a lo que está allá, en las estrellas, donde tú vives para siempre.

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Dónde buscamos


Me decía un viejo amigo, compañero de universidad: Dos búsquedas invisibles son las más frecuentes en los seres humanos. Buscar la felicidad y buscar a Dios. Quedé intrigado por su afirmación y le pregunté cómo era el asunto de buscar a Dios y él me respondió. Pues mira, dijo el Buda:

Buscar a Dios es como andar buscando un buey,
mientras se cabalga en el mismo buey.

En aquel instante comprendí en el centro de mi alma que este asunto no es tema de conocimiento sino de experiencia. La experiencia no se borra, no se olvida, es fuerte e inconmovible, ES. La experiencia igual se refiere a lo divino que al amor humano. Lo que se vive brilla, lo que está escrito palidece.


- Inspirado en mi viejo amigo Miguelito Manzur quien me citó a Siddartha Gautama o el Buda -El despierto-

jueves, 9 de noviembre de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

La raíz de nuestra madera…

Solemos decir en el desierto: Mira a Don Santiago, ese sí que es de buena madera o de esa madera ya no hay. Estas expresiones vinculan la fortaleza y la calidad humana de las personas con los grandes árboles. De esos árboles venimos, desde sus profundas raíces sumergidas en el tiempo, en el silencio de siglos y en siglos de silencio. Por eso, Don Ata, deseaba que su hijo conociera un día el viejo Tucumán en su Argentina y particularmente la zona de Loreto donde encontraba Chimpa-Machu, que es el lugar exacto, la raíz de nuestra madera. Formidable manera de referirse a la tierra de sus ancestros, a ese árbol familiar del que también nació su guitarra, de madera.

- Inspirado en Atahualpa Yupanqui. Cartas a Nenette
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Escupir


Cuentan que un viejo monje budista escupió en el suelo bajo la bondadosa imagen del Buda. Alguna persona le vio y le reprochó. El viejo monje les dijo: ¿Puedes mostrarme algún lugar en el mundo en el que pueda escupir sin que se encuentre allí el Buda?

Esta escena trae a mi conciencia esa vieja discusión entre lo sagrado y lo profano, entre lo correcto y lo no correcto.La respuesta, para variar no está fuera de nosotros sino dentro de nosotros. El ser humano sabe que el universo es un gran templo y el centro de ese templo es su corazón. El presente y el futuro humano dependen de nuestra habilidad para establecer relaciones de centro a centro sin perdernos en discusiones que bordan en la periferia de la existencia.

- Inspirado en un viejo cuento budista zen

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Las frases vivas del amor


El lenguaje humano del amor tiene un manojo de frases emparentadas, casi similares, en la forma, pero únicas en el contenido de la vivencia, únicas en el color, sabor y profundidad de la experiencia propia. Por ejemplo, el amor se vive como milagro, se vive como sueño para la eternidad, el amor es una entrega al destino elegido por uno mismo, el amor es la alegría por estar juntos en el camino de la vida, el amor es oportunidad para compartir la cotidianidad, se aspira llegar hasta el fondo del alma y se suscitan sentimientos como la admiración, la alegría y la gratitud. El anhelo de los que se aman de fundirse, como metales ardientes,preciosos, hasta ser Uno, se siente como la condición para llenar el corazón. El amor vivido, es una manera de confiar la propia vida al Universo, que en su orden, magia y armonía, permite que, en medio de millones de seres, de tiempos y espacios, dos seres coincidan y se encuentren. Cuando esto sucede y se reconoce en la propia experiencia, el amor no puede ser menos que un milagro.