Desde el desierto me uno al sentimiento y convicción de los millones de ser seres humanos que nos llamamos mexicanos y habitamos esta porción del mundo. Esta tierra gracias al párroco de Dolores ,Miguel Hidalgo, dio el grito libertario en 1810 y se le sumaron hombres y mujeres que coincidian en dos anhelos: tener una patria y sentirse libres. Una patria propia que había sido conquistada por el imperio español a sangre y fuego.Hoy, doscientos años después, los mexicanos trabajamos por lo mismo: conservar la tierra de nuestros padres para las generaciones por venir y vivir como seres libres y responsables. Hay tareas inconclusas: una de ellas es corregir el rumbo, afinar la brújula y tener una visión clara sobre el tipo de patria que deseamos.Esa brújula nos marca el respeto mutuo, libertades para todos,la responsabilidad para todos y la solidaridad en todo momento.Hoy nuestra patria es un poco mejor que ayer y trabajemos para que mañana sea aún más digna y mejor que hoy.
1 comentario:
Comencemos pues ejerciendo nuestra propia libertad, con conciencia y respeto por uno mismo, eliminando nuestra erronea percepciòn de la individualidad que marca el egoismo, empatizando a ojos abiertos con todos y cada uno de los seres que nos acompañan, sean del mundo mineral, vegetal,animal, y humano, que no dejan de ser mas que el inicio o la continuaciòn de uno mismo. Sin olvidar que el mìnimo acto de amor o de violencia que ejerzamos regresarà a noosotros multiplicado...
Bravo por tu escrito!!...ojalà un dìa podamos todos los seres,juntos,
celebrar el dìa de la patria TIERRA
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