¿Qué hay entre las lágrimas y la boca? preguntó el pintor, mientras pintaba el rostro de una mujer anciana. Pasado un tiempo él se respondió:la nariz. Pregunta poco usual y respuesta poco usual. La nariz siente con el olfato y registra el eco lejano de las lágrimas. Ese eco trae el recuerdo de la mar salada. Quizá esta es la explicación que dice: cuanto más grande el dolor me siento inundado por una mar de lágrimas. Antes de que las lágrimas lleguen al puerto de la boca,el olfato anuncia que han hecho un largo viaje desde la mar salada.
-Inspirado por una pintura en Café de Duque,Porto Alegre,Brasil,2014.
-Inspirado por una pintura en Café de Duque,Porto Alegre,Brasil,2014.
No hay comentarios:
Publicar un comentario