El año tiene 365
días y el día tiene 24 horas tanto en el hemisferio boreal como en el austral. Desde
este hecho todos los días en cualquier parte del mundo son iguales. Pero
nuestra percepción subjetiva nos lleva a decir, en lenguaje familiar , que hay
días hermosos y terribles, días inolvidables y días en que no quisiéramos estar
vivos y cosas por el estilo. De ahí surgió en Inglaterra que la compañía Sky Travel -a través de sus publicistas- concluyó
en 2005 , que el tercer lunes de enero de cada año se cumplía una fórmula que
daba como resultado que este tercer
lunes sea el día más triste del año o en inglés, el Blue Monday -dado que Blue -azul- es sinónimo de tristeza. Los elementos
que se relacionaron fueron: es el lunes, el inicio de la semana laboral, aún no
se ha cobrado el sueldo mensual
(costumbre que en algunos países es mensual y no quincenal o semanal),
el tiempo en nuestro hemisferio boreal es de invierno y suelen ser días ingratos.
Llegan las facturas y los cargos a las tarjetas de crédito de los gastos de Navidad y de fin de año. Han transcurrido dos semanas y los propósitos buenos del
año nuevo caen en el olvido. El
resultado es un Blue Monday espectacular y para los curiosos la fórmula es:
El
Tiempo atmosférico=Ta, La
Deuda=D, El Sueldo mensual=d, El tiempo que ha transcurrido desde
Navidad=T, El tiempo transcurrido desde
que hemos olvidado los buenos propósitos para el nuevo año=Q, Los niveles de motivación bajos=M y La necesidad de hacer algo=Na.
Aunque esta fórmula
se cumpliera en algunas personas nos queda el recurso de la sabiduría ranchera
de nuestro desierto: Al mal tiempo… darle
buena cara. Es la actitud que elijamos ante las circunstancias favorables o adversas, la que hace y hará la diferencia.
- Inspirado por algunos datos de la Wikipaedia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario