La historia humana es una larga confluencia de necesidades, sentido práctico, creatividad y estética. El resultado son los llamados 'inventos' , instrumentos, herramientas para transformar la realidad material en alguna medida favorable para el ser humano. Las herramientas o instrumentos son extensiones que van en auxilio de nuestras limitaciones y le dan fortaleza a nuestras extremidades a nuestros sentidos . Pensemos por un instante en la utilidad de una martillo, una pinza, un serrucho, un tenedor, la rueda, una cuchara, un puente, un lápiz.
En otra dimensión está el mundo de la reflexión, y de los científicos. La ciencia y la filosofía no tienen como objetivo último 'entender' la realidad natural y social solamente sino 'transformarla' . Por eso recordemos que han pasado milenios y la voz clara de Aristóteles sigue vigente cuando nos dice: "...no reflexionamos para saber lo que es la ética, sino para hacernos personas éticas” Estamos ante el perpetuo tema de si el ser humano puede ser solo un 'creyente' olvidándose de ser 'practicante'. Es un asunto indivisible como el ojo izquierdo necesita del ojo derecho para crear junto una sola imagen.
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