domingo, 11 de marzo de 2007


Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Como vela en el viento

Sí, como una vela en el viento, así describió la noticia de un diario en el desierto, a la vida de una cantante que falleció a temprana edad.Una vida llena de cumbres y de profundos abismos. Para los ojos y la sensibilidad despierta, produce un sentimiento de compasión el ver el tormentoso viaje humano. Cualquier golpe de viento puede apagar la llama y mientras la calma reina la luz resplandece. Esa es la fragilidad y la potencia de una vela encendida. Tan potente y maravillosa es una vela que alguien dijo: la luz una sola vela puede cambiar todo el universo sumido en la oscuridad. Hay vidas que se apagan repentinamente y su brillar fue errático, otras vidas fluyen y confluyen con un brillo potente, sereno y son como grandes faros para otros seres humanos.Pero sea nuestra luz, grande o pequeña, todos somos velas en el viento, finalmente.


Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

La amistad y sus huellas

Resulta que inadvertidamente me procuro sorpresas simples y simpáticas. Por ejemplo, pasado el último verano llegó el invierno. Tomé en el primer día frío mi grueso saco de monte y me encontré con algunos billetes envueltos con una nota de la gasolinera.

En otra ocasión después de una de las tantas mudanzas de casa necesité un libro de Alberti y he aquí que me encontré con un sobre dirigido a mi persona con una tarjeta de agradecimiento y un dinero que me llevó a recordar un examen profesional en el que fui examinador. Fue hace tantos años que los billetes ya no tenían valor por el cambio de moneda que se dio por entonces. Pero la más agradable sorpresa fue una carta que he recibido, agradeciendo un mensaje mío, que yo envié a una amiga con motivo de una celebración que decía así:

estar presente, es la amistad
dar, recibir, dar, recibir, dar...
gratuita como
si caen copos invernales
si el arcoirirs sale
si la flor se abre
y

pasamos por ahí...

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Las alas de la imaginación


Una condición para vivir a gusto en el desierto es tener consigo un mínimo de imaginación despierta. Los humanos la traemos en nuestro equipo de fábrica pero eso no quiere decir que, en la vida diaria, tengamos una imaginación despierta... Así pues, coincido plenamente con las sabias palabras de una mujer extraordinaria – quien dejando su Copenhagen vivió en una remota finca cafetalera en Kenya con sus amigos somalíes, kikuyus y los masai desde 1914 a 1931.

La imaginación es una facultad maravillosa, magnífica -- me parece, inclusive, con la edad, que es lo único verdaderamente divino, de fondo, y que es la base de todo el resto. Las gentes sin imaginación son ´las peores´porque no comprenden nada; los imaginativos son precisamente los dotados para ver la verdadera naturaleza de las cosas, y todas las puertas se abren frente a ellos.


- Baronesa Blixen (17 Abr1895- 7 Sep 1962) autora de Lejos de Africa, El festín de Babette, Siete cuentos góticos, Anécdotas del destino, Ultimos cuentos. Su nombre literario Isak Dinesen.


Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

La gata

Hay dos tipos de personas en este mundo.
El primero, lo forman las que dicen que, puesto el fin, se vale cualquier medio para llegar a él.
El segundo tipo, lo forman quienes no intentan medios para llegar al fin que desean.

Esta segunda postura muestra la desconexión entre la causa y los efectos.
La sabiduría popular ha inmortalizado a la actitud de quienes todo esperan pero, no mueven ni un dedo, para hacer realidad su sueño:

Peces quiere la gata, mas no entrar en el agua

martes, 6 de marzo de 2007


Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera



Susurros

Una hermosa palabra de nuestra lengua castellana es susurro. Si pasamos al verbo susurrar podemos sentir su musicalidad, su textura suave, su intrínseca armonía. Algún día venturoso, nació esta palabra para recordarnos experiencias tan sencillas y plenas como el murmullo del agua que corre en la acequia entre piedrecillas y para evocar la poesía que hay en el soplar de de la brisa entre las ramas de los árboles.Estos son los susurros del mundo a nuestra disposición. Mención especial reciben los susurros humanos que nos llegan al oído en forma de poesía, canción, palabra amorosa y bondadosa, aliento y consuelo. Cuando susurramos llegamos a las recónditas recámaras del alma humana llamada intimidad.

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera


Bajo tierra

El Metro es un transporte subterráneo para gran cantidad de personas en las ciudades más pobladas de nuestro planeta. El metro llama mi atención pues aunque somos seres terrestres hemos inventado la manera de desplazarnos a través del agua, por el los aires y bajo tierra.

Los metros tienen su propia imagen, estereotipada, producto de varios factores.Así, se dice que el metro de Paris es maloliente y el Nueva York está pintarrajeado con graffiti y abundan las colillas de cigarros y botellas de cerveza y que el de Madrid es muy ruidoso y el de Londres, viejo, húmedo, lóbrego, mientras que el de Moscú tiene estaciones que son verdaderas obras de arte pictórica, y escultórica además del lujo en sus lámparas, mármoles etc.

Pues el Metro de la ciudad de México ha sido descrito como pintoresco, por la diversidad de personas y personajes .Al metro se le ha dado durante los últimos 15 años un rostro humano. Por ejemplo ,en sus salas de acceso se presentan grupos de danza moderna,músicos.Se ofrecen libros clásicos de literatura nacional y mundial para leerse durante el trayecto y ser devueltos al final del viaje – aunque no siempre son devueltos- .Se han presentado poetas que susurran poemas para los asistentes en los vagones llamados sopladores. Está en estudio personalizar algunos vagones para que uno esté dedicado a la música clásica y otro a la poesía y otro donde se cuenten cuentos breves para niños y adultos.

Tuvo razón Marc Augé en llamar al metro y espacios multitudinarios similares con el término de los-no-lugares, por su anonimato y masificación.Pero estas iniciativas creadoras van más allá y rescatan un espacio donde se mueven 4.5 millones de seres humanos, cada día. Estas acciones estéticas y humanísticas ofrecidas en un lugar de tránsito efímero, tienen la peculiar cualidad de abrir una ventana a la imaginación y nos pueden dejar un abrazo en el corazón –como me ha sucedido a mi.

- Inspirado por Marc Augé. Los no-lugares. Espacios del anonimato. Barcelona, Gedisa.2005.

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera


La lista

Ya sabemos la lista que dice: terremoto aquí murieron 10 mil, frío aquí se congelaron 20 ancianos.Calor abrasador allá, murieron de sed 15 emigrantes en el desierto rumbo al país de sus sueños.Cerca de aquí, una aldea desapareció arrasada por un alud de nieve y rocas.Ya sabemos las frases de comentario: Y si Dios es Dios ¿por qué permite todo esto? ¿Por qué tanta injusticia y la muerte de tantos inocentes bajo la furia de la naturaleza? Preguntado por todo esto un viejito que había vivido mucho y que hablaba poco, dijo:

En la naturaleza no hay premios ni castigos
solamente causas y consecuencias.


- Inspirado en un proverbio del desierto chino.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera


Alto contraste


Por un lado está la publicidad que muestra en anuncios espectaculares en las autopistas así como en televisión un mundo de absoluta felicidad. Mires usted esas sonrisas con dientes blancos como las nieve de los alpes. Vea usted esas cabelleras doradas que ondulan bajo el sol. Observe cuerpos delineados, esbeltos, bronceados, atléticos sin ápice de grasa o defectos observables como una arruga aquí o un lunar. Le siguen los infinitos comerciales de niños felices comiendo hamburguesas junto a su perro labrador recién bañado y mujeres exhibiendo su lencería de seda glamorosa.Todo ellos es algo de un mundo ideal y no se diga de automóviles, relojes, trajes y equipos deportivos pasando por vinos servidos en grandes copas.Por el otro lado está el consumidor que cada día se siente más lejano de todo ese mundo inventado como el mago que saca al conejo de su sombrero. El consumidor medio ,se siente en la antítesis de ese mundo, se queja de que esta gorda, chaparra, morena, que vive en donde pintan con graffiti su casa y los perros se comen las sobras de las bolsas de plástico que son una nube y el puente a desnivel con su incansable tráfico de vehículos le deja el hollín hasta en los dientes.Qué abismo entre el anuncio del carro BMW con una pareja feliz y deportiva con la realidad de ir apretujado en el metro sumergido en el baño de sudores y el infaltable vendedor de discos compactos piratas que sonríe y canta: 10 pesitos le cuesta, diez pesitos le vale o dos por 15, ¿cómo la ve?. Mientras escribo estas líneas veo como los vientos del final de invierno forman remolinos decorados con empaques de huevo, bolsas de plástico, botellas de refrescos y rodadoras que bailan desafanadamente. Como el viento es señor omnipotente en los cielos, quién sabe si esta basura que veo en el desierto nos llega desde Nueva York, Tepito o Sydney.