Cuentan que Carlomagno, el gran emperador, se enamoró de una muchacha alemana y ardió en pasión por ella y descuidó los asuntos de su imperio. Un día la muchacha murió súbitamente. La corte pensó que con ella se aplacaría la pasión del emperador. No sucedió. La muchacha fue embalsamada y Carlomagno la tuvo en su aposento .Preocupado el Obispo por la obsesión de Carlomagno inspeccionó el cadáver y encontró debajo de la lengua un anillo con una piedra preciosa y lo retiró. Carlomagno cambio su pasión por la muchacha enamorándose del Obispo. Temeroso ante este giro el Obispo tomó el anillo y lo tiró al lago Constanza. Carlomagno se sintió súbitamente atraído por el lago y edificó en su orilla un castillo y ahí paso el resto de su vida en contemplación melancólica. ¿Fue el amor a la muchacha, la necrofilia, la homosexualidad el lago Constanza lo importante? o ¿Fue el anillo lo que hizo girar a todos en torno a sí?. ¿Cuál es el anillo que nos hace girar hoy a todos? ¿La droga y sus negocios, el consumo ilimitado y su espejismo de felicidad, el poder calculado e invisible que mueve a los títeres? Circulo gracioso y círculo vicioso.
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