Los poetas intuyeron muchos siglos antes los descubrimientos de los científicos. Resulta que el corazón de la materia de todo en el universo no es algo pesado sino un conjunto de partículas tan ligeras y leves que flotan suspendidas concluyéndose que más allá de la apariencia de solidez todo es levedad como aire, como luz. La levedad, la ligereza no es monopolio de las últimas partículas atómicas sino que está presente en diversas sensaciones y movimientos internos de nuestro ánimo .Bajo los sentires del amor, de la alegría y el entusiasmo, todo se torna impregnado de levedad en nuestro ser y la vida misma la tocamos como una levedad que fluye y discurre como las aguas claras y frescas que bajan de la cordillera de los Andes hacia el mar.
1 comentario:
MUY hermoso
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