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Floralis Genérica,Bs.As. |
Estar en una ciudad hermosa como Buenos Aires me provee de súbitas e inesperadas oportunidades que irrumpen en mi vida como centellas y como destellos. A esas luminosidades instantáneas les llamo las experiencias del arte. Una fuente, un jardín, un edificio del siglo pasado me llevan de la mano a sentir el arte no a pensarlo.El arte me sucede en cada instante.Depende de mi captarlo. El arte es una manifestación sencilla o gloriosa pero siempre es una manifestación o epifanía. Cada destello viene envuelto por la emoción. Solo necesito despertar cada día a mis sentidos para saber contemplar el tiempo, las finas gotas de la lluvia o el musgo,las rendijas en los techos de madera y teja.Las ciudades se esfuerzan por tener museos pero los ciudadanos podemos olvidar que el arte no se encierra sólo en los museos. Estar vivos,despiertos, es vivir experiencias de la belleza a través de nuestros sentidos desde que el sol se asoma hasta cuando se va a dormir. Es cierto, hay veces en que puedo ir a un museo formal.Las más de las veces tengo a mi mano la cercanía de las experiencias que me dejan sin palabras,profundamente agradecido con la vida, con la amistad,con el amor.
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