Tomar es un verbo con una treintena de significados pero los más
inmediatos refiere al tomar un plato, tomar una bebida o tomar una actitud ante algo. Tomar una bebida es
fácil y más si es de un solo golpe como cuando se dice: tomarse un trago, sea
dulce o amargo. En el sentido metafórico también decimos que los seres humanos
, y sólo nosotros, tenemos la oportunidad de tomar la vida o tomar la vida en
nuestras manos -de esta tarea esta
excluidos todos los demás seres vivos no humanos. Entrados en este terreno los
consejos no faltan sobre cómo tomar la vida. Ante la vida he podido
observar que hay dos grandes equipos
de seres humanos y así me lo ha confirmado un luminoso Haiku de un buen amigo
mexicano.
Hay
quienes toman
La
vida para morirla
otros
para vivirla
C López Moctezuma.
Los seres humanos hemos desarrollado una
suerte de amor con los elementos. Invitamos al fuego y el se digna arder en
nuestra chimenea invernal. Invitamos al aire y el se digna jugar con nuestra
campana tubular. Invitamos a la tierra y
ella habita en nuestras macetas, en un mínimo huerto. Invitamos al agua y
ella toma la forma de la fuente que la
contiene. Me gusta eso de invitar amable y juguetonamente a los elementos.
Pensar en la fuente
es invitar al agua
Soy
habitante de este mundo y del desierto por elección. La vida en estos parajes
de felicidad natural, silencio natural y presencias naturales calladas
-como la arena, la brisa, los copos, las hojas al viento, los gansos en
su vuelo y los zorros enamorando a la
luna llena- es un regalo cotidiano. Mi despensa del alma abunda en algo para
leer, y algo para escuchar. Con todo y lo hermosa que es la música compuesta
por los humanos, hay días que no me es indispensable, porque me he familiarizado
con la música de las esferas celestes y las sinfonías del viento, la lluvia
escasa, y el crepitar de los leños. Resumo estas vivencias naturales con un
bello haiku mexicano:
Golpea
el viento
mi
ventana, me recuerda
Fernando,
el veterinario de Argus León , es imaginativo o como decimos en estas tierras
desérticas un cáeme bien. Su consultorio y tienda está tapizado de monerías, es decir accesorios simpáticos
para el mundo canino. Pero entre todo ese mundo divisé una frase inspiradora en
lo alto de uno de los muros junto a un simpático bulldog y se me alegró el día: La razón de que un perro tenga tantos amigos, es que mueve la cola y no
la lengua... ¿quién podrá negar las enseñanzas de
nuestros llamados hermanos menores?
A un paso del taller mecánico que frecuento está otro taller de pintura
automotriz que muestra a la mirada de
todos un cartelón que dice: Si tu carro
no tiene puerta , eres pobre. Si tu carro no tiene techo, lo festejamos, eres ¡
rico ¡ ¿alguna prueba más requiere el ingenio mexicano?