El antiguo Imperio del Sol Naciente, la tierra de los bravos Samurai, la tierra del Zen ha sido triplemente herida. Un terremoto irrefrenable, un tsunami colosal y plantas nucleares venenosas y letales en una tríada apocalíptica se han tornado sobre este pueblo. Mientras escribo, aún se debaten en la tragedia natural y humana. Una pequeña isla en el vasto océano. No hallo palabras pero en mi auxilio invoco a nuestro querido José Emilio:
El Mar no tiene dioses
El mar no tiene dioses.
-Propercio
El mar no tiene dioses porque el mar
Es más vasto y antiguo que la Tierra.
Es comienzo de todo y por eso mismo
Acaba de nacer en este instante.
El rumor de las olas en la arena
Es su primer sollozo.
El mar está llorando por nosotros
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