martes, 14 de diciembre de 2010

En un instante

Entre todas las emociones humanas la rabia, el enojo, la furia, es la más notoria, la más sensible y movilizadora en nuestras vidas. Esta emoción, por otro lado, es temida, poco entendida, poco aprovechada para humanizarnos, ocultada o sobreactuada destructivamente. En pocas palabras, es una arte el saber cómo conducir la propia vida cuando estamos bajo el embriagante estado de la rabia, la furia, el enojo. Me siento agradecido para con todos los maestros y maestra de vida que con su ejemplo y palabras le han dado luz a mi vida en la exploración y conducción de esta poderosa emoción. En esta ocasión quiero recordar sólo un punto que se resume así: En el instante que sentimos rabia, durante una controversia, dejamos de esforzarnos en buscar a la Verdad, en ese momento, y comenzamos a esforzarnos en ver sólo para nuestros intereses.

No hay comentarios: