Y todos los días lo mismo, pero todos los días diferente. Mi amigo Esteban se pone de pie en la loma y pasea la mirada -cada día un poco más cansada- por el horizonte de nuestro llano. Su descripción se detiene unos días en las nubes, otra en los vientos, alguna en los pájaros. Esteban es el anunciador de lo siempre nuevo. En estas tierras nuestras ondea como bandera blanca una hoja mínima escrita por mi querido José Emilio :
Aunque renazca el sol,
los días no vuelven
[1] J.E.Pacheco.Sucesión
No hay comentarios:
Publicar un comentario