jueves, 2 de junio de 2011

Rectificar el rumbo y el paso


Para avanzar es necesario rectificar el rumbo y retomar el paso, no distraerse más de la cuenta y recordar que no es el caballo el que nos lleva sino el jinete quien conduce al caballo. Dentro de nuestra larga lista de desaciertos y errores humanos esta la siguiente observación que demuestra que el primer obstáculo que tiene el ser humano es su propia ignorancia. Una querida amiga dejó este mensaje en mi ventana y le estoy agradecido: El hombre es el único animal que ensucia el agua de la cual bebe, corta el árbol que le da sombra y mata sin tener hambre. Por esta sin razón tenemos que el llamado “occidente” de nuestro mundo es la infeliz parte del mundo donde hay más sobrepeso y obesidad del planeta, donde se tira y se vomita la comida que a millones les falta. Las enfermedades que le aquejan son las de la abundancia material y la ignorancia sobre lo importante verdaderamente como aquello de comemos para vivir y no hemos de vivir para comer  -sin que esto signifique estigmatizar el placer- Nunca estará de sobra que lo más sencillo es lo más raro y más escaso en nuestra forma extraviada de pensar, sentir y actuar: encontrar en todo el camino de en medio.

1 comentario:

Anónimo dijo...

al filo de la navaja