miércoles, 5 de junio de 2013

Bosque sin caminos

Y la vida me parece un bosque sin caminos, dijo Robert Frost en su  inolvidable poema Abedules. Inabarcable e insondable es la magnitud de la vida en su anchura , longitud y profundidad de vivencias y experiencias. La vida como aires y cielos, como mar casi sin orillas, como bosque  de vida pero al mismo tiempo un laberinto real y metafórico, que por abarcar la totalidad nos perdemos del portento de una sola hoja  en la que se desliza la gota de rocío. El bosque sin caminos, el mar sin senderos ni puerto en el horizonte. Hemos ido y vuelto a la luna, pero a cada uno de nosotros le espera el bosque de la propia vida...

1 comentario:

Anónimo dijo...

.....que delicia volver a leerte.
qué regalo!