jueves, 11 de noviembre de 2010

Agua clara y alguna pregunta

Cada mañana durante el ritual tempranero de echarle agua clara a las verdes matas, al pasto y cada dos días sacar el depósito de la basura doméstica me encuentro siempre con un piquete variado de pájaros y pájaras, supongo, que rondan la vereda de la casa. Torcasitas, Habaneras, Gorrioncitos, algún despistado Oriol y las urracas que me recuerdan a Tuco y Tico las urracas parlanchinas... Rondan y esperan, esperan y rondan para que les de su desayuno comida y cena combinada -pues aquí sólo comparten un alimento conmigo. Puesto el contexto viene la pregunta. ¿Cuántos años vive una torcasita? ¿Las que veo cada mañana serán las mismas de ayer? ¿Quienes son nuevas para mi quiénes han llegado por primera vez a mi humilde mesa? Las veo, las contemplo, me regocijo y ellas ¿cómo me verán, qué pensarán de este ser que les da unos granitos mientras echa agua clara a las verdes matas, al pasto y cada dos días saca el depósito de la basura doméstica? Es mucho lo que ignoro de sus vidas y ellas de mi vida, pero lo más importante es que cada mañana…llueve, truene o relampaguee ahí acudimos .Es un encuentro sin palabras, con pasitos callados, ellas en lo suyo -mirándome de reojo- yo entretenido echando el agua clara… es, sin duda, un instante de eso que llamo: la felicidad.



No hay comentarios: