Un anhelo humano es la permanencia y la inmortalidad. Un temor humano es
tener que morir. Desde que en este mundo
somos, el anhelo y el temor se tejen como dos hilos de la misma cuerda. Cuando
me detengo y contemplo a mis viejos árboles me reconforto. Los árboles me dicen,
con su silencio, más que todos los libros escritos por los humanos. Por eso,
recuerdo el mensaje de un amigo guitero: Cada vez
que abres un libro y te dispones a leerlo, un árbol sonríe al ver que sí hay
vida después de la muerte.
Es una antología de las Cartas del Desierto que trasmito en Radio Universidad 105.3 FM y 1310AM, Chihuahua. Mexico. Una mirada sobre el mundo, la vida y la historia Social desde el desierto Chihuahuense en el Norte de México. Escribo y comparto mis sentires mientras vamos de camino: Si estas Cartas te ayudan y las reproduces, cita al autor y a la fuente. ¡Gracias por escribir tus comentarios¡ -La vida abre la puerta,nosotros hacemos el camino-
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