Cuando el año nuevo despierta es hora de ponerse en el camino pues la caravana no se detiene indefinidamente. En
nuestro invierno boreal del desierto me admiro cada vez que soy testigo del
paso de las grandes bandadas de patos y gansos que vienen de norte a sur en
busca de cobijo y de sur a norte cuando el tiempo se suaviza. Formaciones
armónicas que gozan en su vuelto y en sus alturas. Formaciones que me regalan
la alegría de sus evoluciones y de esos lazos que trazan en el aire con una
suerte de belleza indescriptible. Patos y gansos que me hacen un guiño y me
dejan una sonrisa mientras ellos cruzan las fronteras que los humanos ponemos
en tierra, sin necesidad de cargar un tanque de gasolina, llevar un pasaporte y
visa, sin preocuparse de tener un manojo de dólares o pesos, ni pedir permiso
en las aduanas. No necesitan aprender lengua alguna ni ser bilingües -sólo
tienen la alegría de sus cantos, idioma universal. Invierno en el desierto,
escenario espléndido de una vida en libertad, en los cielos azules y limpios mientras
en la tierra siguen las marchas, los amores, las balas, los llantos , las
maldiciones , los quebrantos y las esperanzas para alcanzar lo que parece casi
inalcanzable: la convivencia de los seres humanos en paz bajo los cielos…
Es una antología de las Cartas del Desierto que trasmito en Radio Universidad 105.3 FM y 1310AM, Chihuahua. Mexico. Una mirada sobre el mundo, la vida y la historia Social desde el desierto Chihuahuense en el Norte de México. Escribo y comparto mis sentires mientras vamos de camino: Si estas Cartas te ayudan y las reproduces, cita al autor y a la fuente. ¡Gracias por escribir tus comentarios¡ -La vida abre la puerta,nosotros hacemos el camino-
lunes, 12 de enero de 2015
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1 comentario:
Gracias Guillermo, por invitarnos a volar en tu bandada, manteniendo la línea de un ser humano sin limites ni fronteras! Feliz año 2015 plenitud de sentido!
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