lunes, 27 de noviembre de 2006



Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera


Sé mi amigo


Es un regalo de la vida contar con buenos amigos. No encuentro medio más valioso para honrar su memoria que mejorar mis pasos de cada día con su ejemplo, con su huella en la tierra. Un día como hoy partió de este mundo después de vivir en él 47 años un hombre que vivió lo que escribió cuando dijo:

No camines delante de mí, no te seguiré.
No camines detrás de mi no te conduciré.
Camina junto a mí, solamente, y sé mi amigo.


Este hombre hizo de su lealtad a su verdad y al espíritu de libertad la divisa de su intensa vida que ardió con tal fuerza que su resplandor y aliento me siguen acompañando.

-Inspirado en Albert Camus (1913-1960)

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Alimentos

En un viejo camino donde termina el desierto y comienzan los Himalayas, quienes ascienden a las montañas sagradas, tienen por costumbre, dejar un poco de alimento en la orilla del camino -protegido por unas cuantas piedras- para quienes vienen detrás y también algún breve mensaje para acompañar en la ruta. Uno de esos caminantes dejó esta pequeña nota:

Recordar y no olvidar.
Vivir en el mundo sin apegarse al polvo del mundo
Si presencias buenas acciones de otro, imítalas
Si presencias acciones equivocadas, pásalas por alto
Aunque estés sólo en una habitación oscura,
compórtate como si estuvieras
ante el más valioso y querido de tus huéspedes.
Exterioriza tus sentimientos
pero que ellos no sean más expresivos
que tu propia naturaleza
.

-Inspirado en Zengetsu

martes, 21 de noviembre de 2006





Cartas del Desierto


Guillermo Pareja Herrera

Los cuentos y mi piel


Pienso en mi madre.Mi madre la mujer que me contaba cuentos estando despierto, para despertar a la vida y estando dormido para despertar a la tarea cotidiana.Igual pasaba de Rojín y Verdín, dos gorrioncitos que aprendían a volar, que al Corderito de un párroco en un pueblo de la campiña francesa. De ahí viene mi amor por escuchar cuentos, leer cuentos y contar cuentos.Eso que llaman la historia humana está hecha de una galaxia de galaxias de millones de estrellas las cuales contienen infinitos cuentos.Los cuentos eran repetidos por mi madre como la mujer que echa la semilla al boleo en el campo abonado.Los cuentos, como las semillas echadas al viento son minúsculos fragmentos que caen donde tienen que caer y cuando tienen que caer. Los cuentos están destinados a dar frutos que, por igual, iluminan una porción de la vida o producen un cambio de piel completo, como me ha sucedido varias veces a lo largo del laberinto de mi vida.Los cuentos de mi madre, sin olvidar lo cuentos de mi padre, me llevaron,a menudo, por caminos sin trillar,a conclusiones diferentes de lo esperado porque la vida que vivimos en casa tuvo la rara cualidad de ser imprevisible. Los cuentos fueron el espejo de nuestros asombros familiares y nuestros asombros se convirtieron en cuentos improvisados como el apasionado y turbulento De Panca en Panca -la interminable escalada de un niño africano a un árbol de tamaño colosal, que haría palidecer a cualquier otro libro de aventuras de la época-.
¡Ay, de los niños de este tiempo que no tienen quien les cuente un cuento que les haga sentirse amados en el instante de cerrar los ojos.!


Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Laika


Laika se llamó el primer ser vivo enviado al espacio extraterrestre. Fue una perrita de 13 libras de peso y tres años de edad aproximadamente. Su viaje lo realizó a bordo del cohete ruso Sputnik II, el día 3 de noviembre de 1957. Llevó puestos varios sensores para registrar datos fisiológicos que ayudarían para el envío de seres vivos humanos, como fue el caso de Yuri Gagarin el primer cosmonauta.El mundo quedó asombrado por este envío y su pasajera, cuyo nombre significa en ruso Ladradora, y su perfil recuerda al grupo Husky.Laika giró alrededor de nuestro pequeño planeta durante 10 días antes de que fuera puesta a dormir para siempre, porque no se contaba con mecanismo para que retornara a tierra sana y salva. Yo fui un niño de 8 años, entre millones, que se asombró por ese suceso y, desde entonces, se acrecentó mi amor y cuidado de los seres vivos.No he dejado de preguntarme ¿Laika, cómo viste a la humanidad desde esas alturas? ¿Ha valido la pena tu sacrificio para la convivencia pacífica entre los humanos y con todos los seres vivos? Querida Laika, tú nos enseñaste a que aspiremos a lo bueno, a lo mejor y a lo que está allá, en las estrellas, donde tú vives para siempre.

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Dónde buscamos


Me decía un viejo amigo, compañero de universidad: Dos búsquedas invisibles son las más frecuentes en los seres humanos. Buscar la felicidad y buscar a Dios. Quedé intrigado por su afirmación y le pregunté cómo era el asunto de buscar a Dios y él me respondió. Pues mira, dijo el Buda:

Buscar a Dios es como andar buscando un buey,
mientras se cabalga en el mismo buey.

En aquel instante comprendí en el centro de mi alma que este asunto no es tema de conocimiento sino de experiencia. La experiencia no se borra, no se olvida, es fuerte e inconmovible, ES. La experiencia igual se refiere a lo divino que al amor humano. Lo que se vive brilla, lo que está escrito palidece.


- Inspirado en mi viejo amigo Miguelito Manzur quien me citó a Siddartha Gautama o el Buda -El despierto-

jueves, 9 de noviembre de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

La raíz de nuestra madera…

Solemos decir en el desierto: Mira a Don Santiago, ese sí que es de buena madera o de esa madera ya no hay. Estas expresiones vinculan la fortaleza y la calidad humana de las personas con los grandes árboles. De esos árboles venimos, desde sus profundas raíces sumergidas en el tiempo, en el silencio de siglos y en siglos de silencio. Por eso, Don Ata, deseaba que su hijo conociera un día el viejo Tucumán en su Argentina y particularmente la zona de Loreto donde encontraba Chimpa-Machu, que es el lugar exacto, la raíz de nuestra madera. Formidable manera de referirse a la tierra de sus ancestros, a ese árbol familiar del que también nació su guitarra, de madera.

- Inspirado en Atahualpa Yupanqui. Cartas a Nenette
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Escupir


Cuentan que un viejo monje budista escupió en el suelo bajo la bondadosa imagen del Buda. Alguna persona le vio y le reprochó. El viejo monje les dijo: ¿Puedes mostrarme algún lugar en el mundo en el que pueda escupir sin que se encuentre allí el Buda?

Esta escena trae a mi conciencia esa vieja discusión entre lo sagrado y lo profano, entre lo correcto y lo no correcto.La respuesta, para variar no está fuera de nosotros sino dentro de nosotros. El ser humano sabe que el universo es un gran templo y el centro de ese templo es su corazón. El presente y el futuro humano dependen de nuestra habilidad para establecer relaciones de centro a centro sin perdernos en discusiones que bordan en la periferia de la existencia.

- Inspirado en un viejo cuento budista zen

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Las frases vivas del amor


El lenguaje humano del amor tiene un manojo de frases emparentadas, casi similares, en la forma, pero únicas en el contenido de la vivencia, únicas en el color, sabor y profundidad de la experiencia propia. Por ejemplo, el amor se vive como milagro, se vive como sueño para la eternidad, el amor es una entrega al destino elegido por uno mismo, el amor es la alegría por estar juntos en el camino de la vida, el amor es oportunidad para compartir la cotidianidad, se aspira llegar hasta el fondo del alma y se suscitan sentimientos como la admiración, la alegría y la gratitud. El anhelo de los que se aman de fundirse, como metales ardientes,preciosos, hasta ser Uno, se siente como la condición para llenar el corazón. El amor vivido, es una manera de confiar la propia vida al Universo, que en su orden, magia y armonía, permite que, en medio de millones de seres, de tiempos y espacios, dos seres coincidan y se encuentren. Cuando esto sucede y se reconoce en la propia experiencia, el amor no puede ser menos que un milagro.

lunes, 30 de octubre de 2006


Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

La querencia

Unos llaman Patria chica al lugar donde nacieron y razón les asiste pues patria quiere decir la tierra de nuestros padres. El cantar a la patria chica es ritual universal. Nos referimos también a la patria chica como mi pueblo, terruño, aldea, villa, o pago. Para muestra un botón y no olvidemos a Jorge Luís Borges quien al volver de Europa en 1923 a su patria escribió el inolvidable poemario Fervor de Buenos Aires. Otro coterraneo, Don Ata, escribió un poema-canción llamado Querencia y dice así:

Todos hablan de su pago como si fuera el mejor.
Mi querencia es el camino bajo la luna y el sol (…)
Se llena mi voz de estrellas y
el viento arrastra las nubes y
me vuelvo todo niebla.
Yo soy de un pago muy lejos.
Mi pago se llama…Huella,
mi amor se llama Guitarra, y
mi caballo…Paciencia.

Estos dos hombres supieron sentir el amor a su barrio y a su pago hondamente, y supieron ser, universales, como para abrazar al mundo.


-Inspirado en Atahualpa Yupanqui. Guitarra. Poemas y cantares argentinos. Querencia, p.63

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

El doble acierto

Cuentan que un emperador del desierto de Gobi, fue a consultar a un vidente afamado y le preguntó si él ganaría la próxima guerra que estaba preparando contra sus enemigos. El vidente guardó silencio, durante un tiempo, y le dijo: No, no ganarás esa guerra. La noticia le cambió la cara al emperador y se tornó enfurecida. El emperador le dijo al vidente: Puesto que eres muy hábil para predecirme el futuro ¿podrías decirme cuándo será el día de tu muerte? El vidente guardó silencio durante un tiempo y le dijo al emperador con gran serenidad: Hoy será mi último día en este mundo, y se retiró. El tirano emperador le gritó: Muy bien, vidente, acertaste en las dos cosas, te felicito. Ese día el tirano mandó que le cortaran la cabeza al afamado vidente que se atrevió a decirle la verdad. No ganarás esa guerra.

-Inspirado en un antiguo cuento del desierto de Gobi.

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

En lo alto

Las cumbres de las lomas, de las sierras o de los grandes nevados tienen la peculiaridad de brindarnos el descanso, el sosiego y hasta instantes de paz.En lo alto los instantes se pueden vivir, como eternidad y también, la eternidad, la podemos sentir como un parpadear. En lo alto, podemos viajar si movernos pues todo el universo cabe en el más pequeño de los bolsillos de nuestra alma.Los espacios libres, en lo alto, permiten que nuestro ser se viva como gota en el mar.Nos diluimos y, sin dejar de ser, nosotros, nos olvidamos por unos instantes de quiénes somos, pues estamos absortos en el contemplar… desde lo alto. Don Ata en sus andanzas, unidas a su guitarra, como un pañuelo que nos enlaza en el corazón, cantó un día así:

En lo alto de la sierra
me detuve a descansar;
pero sentí que me iba…
sin moverme del lugar.

Los ojos se me perdieron
en aquella inmensidad,
y me olvidé de mi mismo
tanto mirar y mirar…

La fascinación de lo alto, nos permite unir el cielo con la tierra. Podemos ver la pequeñez de los grandes problemas humanos y desde nuestra pequeñez tocar el cielo.

- Inspirado en Atahualpa Yupanqui. Guitarra- Poemas y cantares argentinos. El Cielo. p, 75

jueves, 26 de octubre de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

La victoria alada


Tuve una tía, no bien querida de origen griego, que se llamó Niké. Niké para aquí y Niké para allá.Pero, un día, en una clase de etimologías griegas me topé, nuevamente, con el recuerdo de la malhadada tía Niké que se transfiguró en Niké, la diosa de la Victoria. Ahondando en la diosa navegué, no en Internet que ni en sueños la hacía, sino en la enciclopedia familiar más portátil de entonces, El Pequeño Larousse. Fue un amor a primera vista, un amor fulminante sentí al contemplar a la Victoria alada de Samotracia -su nombre completo- una deslumbrante escultura marmórea de 2.40 metros de altura. Niké fue descubierta en 1863 en la isla de
Samotracia por el cónsul francés, Charles Champoiseau, arqueólogo aficionado. La hermosura pasmosa de Niké se halla interrumpida pues su cabeza fue mutilada y ha de vivir en el fondo del mar. La Victoria de Samotracia simboliza, para mí, que la victoria, no se le concede a nadie en propiedad ni en perpetuidad. La victoria es el gozo de un instante que ,en el instante siguiente, levanta el vuelo. Más aún, lo que en un instante es fracaso en el instante siguiente se convierte en Victoria y así sucesivamente.La Niké tuvo como destino la proa de un barco de guerra griego pero nunca llegó a ser instalada y hoy preside un recinto especial en el Louvre de Paris. La victoria mutilada evoca una realidad: todos podemos ser victoriosos sobre nuestras debilidades, cobardías y limitaciones y levantar el vuelo hasta los espacios libres, en el horizonte marino de nuestra vida.Circunstancia sorprendente es que la Victoria decapitada y alada comparte su gloria y esplendor, en el museo del Louvre, con la amada Venus de Milo con sus brazos mutilados. Niké y la Venus son un llamado para que nosotros completemos con nuestra vida lo que ellas perdieron: el rostro y los brazos.Hoy existen millones de seres humanos que son los sin rostro porque nada valen y millones de brazos que no encuentran trabajo.

- Niki tis Samothrakis (Νίκη της Σαμοθράκης)
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Bordoneando y escribiendo

Bordonear es el arte de los guitarreros que tocan las cuerdas más bajas y roncas de su guitarra. El bordoneo puede ser hasta un susurro al oído unas veces sedecutor, galante, o portador de un lamento, dolor o queja.En noches de nostalgia la guitarra puede sonar como el ronroneo del gato que haciéndose ovillo se calienta cerca del fogón. Un día dijo Don Ata acariciando a su guitarra:

Me gusta de vez en cuando perderme en el bordoneo, porque bordoneando veo que ni yo mesmo me mando. Las cuerdas van ordenando los rumbos del pensamiento. Y en el trotecito lento de una milonga va saliendo campo afuera lo mejor del sentimiento. Siempre en voz baja he cantao porque gritando no me hallo…

Justo es decir que hay coincidencias entre bordonear la guitarra y escribir.Cuando tomo lápiz y papel parece que alguien guía mi mano, mientras mente y corazón se acompasan y van brotando como agua de manantial. Bordoneando y escribiendo, yo no olvido que de palo es la guitarra y de palo se hizo el lápiz, palo que es bosque, tierra, sol, polvo de estrellas.

-Inspirado en Atahualpa Yupanqui. Bordoneando. Guitarra. Poemas y cantares argentinos. p,79
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Los tres gatos del samurai

Un guerrero samurai tuvo problemas con un ratoncito que decidió vivir en su habitación y comer la comida del samurai. Le aconsejaron al guerrero conseguir un gato impresionante, fuerte y hermoso. El ratoncito se burlaba del gran gato y sólo asomaba la nariz. El gato no pudo con él. El samurai trajo a un segundo gato astuto, fiero y desconfiado. El ratoncito sólo salía a comer cuando el sueño vencía al gato. El gato no pudo con él. Por último el guerrero samurai trajo a un gato de un templo budista de aspecto distraído, mediocre y con cara de soñoliento.Pasaron los días.El gato siempre con cara de soñoliento e indiferente dejó de inspirar precauciones al ratoncito que pasaba junto a él sin apenas hacerle caso. Un día, repentinamente, lo atrapó de un solo zarpazo.

Esta vieja historia budista me recuerda que entre los humanos hay tres actitudes ante la vida que llegan a tres diferentes resultados. La apariencia no es lo importante sino la actitud alerta, aún bajo capa de soñolienta indiferencia. Y por el lado del ratoncito, es un recordatorio para estar presente, plenamente, en cada instante.

- Inspirado en un viejo cuento budista





miércoles, 18 de octubre de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Un poquito de arena

Cuentan que el infatigable viajero invidente que fue Jorge Luis Borges llegó con María Kodama al desierto egipcio y ante el silencio y frente a las pirámides milenarias ,se inclinó tomo un poquito de arena en su manos, abrió la palma y dejó que el viento se llevara esos granitos .María Kodama le dijo coloquial y amorosa:

Usted me regaló un imperio de palabras,
modificó el desierto y
me reveló que la luna era mi espejo.

Me quedo con, Usted modificó el desierto. El más mínimo gesto y acto modifica al todo. Por eso cada paso, cada huella, cada palabra que sale de nuestros labios, cada encuentro y contacto nos cambia, y al cambiar el todo, la vida, el universo, son siempre nuevos y maravillosos. Esos gestos despiertan gratitud.

- Inspirado en J.L.Borges. Epílogo de Atlas. .Texto en la exposición fotográfica de María Kodama. Recoleta, Buenos Aires Octubre 3,2006.








Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera


Ser como flor del campo

La vida nos lleva a unos a viajar y viajar a otros les lleva a estar y a estar en su casa, en su rancho o en su pago.Cada viaje es un encuentro con seres queridos y otros nuevos y desconocidos que luego se convierten en cercanos y hasta familiares. Pero el secreto es la actitud con la que se viaja.Cuanto más abierto a descubrir, cuanto más abierto a tender puentes humanos, cuanto más ciudadano del mundo mejor, siempre mejor.Escribo en un avión que me lleva, yo no vuelo. Volar, sólo vuelan las aves. El avión es un tubo de aluminio que te transporta mas la sensación de extender las alas y respirar la frescura del aire es imaginaria en un aparato llamado avión.Esas horas largas o cortas en los estrechos aviones no son tierra baldía para mí. Volviendo al asunto de la actitud para viajar, mi viejo Don Ata me susurra al oído, desde el silencio, sus palabras sabias y yo escribo:

Soy como la flor del campo,
donde me tiran me planto,
en el monte o en las peñas…




- Inspirado en. Atahualpa Yupanqui. Bailecito. Flor del Campo. Cartas a Nenette Paris.Martes 25 Agosto 1962.p.91























Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Caballos ,barcos, aviones y pañuelos


Los pies del ser humano fueron su primer medio de transporte.Pasaron muchos muchos años y se valió de otros medios domesticando al caballo y al camello, al elefante y al avestruz sin olvidarnos del asno o burro.Entre todos estos seres vivos el caballo ha sido y sigue siendo el medio excelente.Díganlo las pampas argentinas o el desierto chihuahuense. Sin embargo, un día surgieron los medios masivos de transporte para humanos y sus cargas.Nacieron los barcos de todos los estilos y reinaron durante siglos y siglos.Pero hoy, el rey del planeta es el avión y parece que reinará largamente. Estoy contemplando el Puerto Madero en Buenos Aires. Es inevitable la presencia de Don que fue el cantor caminante por más de 50 años quien le dice a Nenette su mujer en una carta:

Nunca hice una canción sobre el mar...Están quietos y vacíos, los puertos y las costas.Ya no hay navíos, no hay adioses largos ni ocasos devorando trasatlánticos.Está muy triste la mar, porque está sola.Ya no suenan violines en sus noches tranquilas. ¡La urgencia, la urgencia, la velocidad! El avión es el rey, pero no tiene paisajes para mostrar.Las emociones quedaron en el mar, y los puertos no tienen los pañuelos del adiós. ¿Qué le pasa al mundo?


- Inspirado en. Atahualpa Yupanqui. Cartas a Nenette Paris.Martes 13 Agosto 1980.p.267






















domingo, 24 de septiembre de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Brisa me trae, brisa me lleva


Brisa, el extremo opuesto del vendaval.
Brisa, airecillo navegante que cruza el desierto tempranero en viaje de ida y por la noche en viaje de vuelta.
Brisa, vientecillo suave que nos toca y se lleva la pesadumbre que el andar y el tropezar nos dejan.
Brisa del desierto discreta, brisa urbana serpenteante, ululante que se cuela entre viejas ventanas y zaguanes y envuelve a los árboles para besarlos en el oído.
Brisa, sopla y mece el desierto y a una plazoleta recoleta, escondida, umbría, en Buenos Aires donde mi buen Jorge Luis Borges escribió:

La brisa trae corazonadas de campo,
dulzura de las quintas,
memorias de los álamos…



-Inspirado en J.L.Borges. Fervor de Buenos Aires / Caminata
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Manojito


Dice un cartel gigante de esos que están en lo alto de un edificio, en un edificio de esos que ocultan el andar del sol en la gran ciudad. Ud sin esta cámara Minolta no podrá vivir. Cosa bonita son las fotografías, no lo dude usted pero hay otras fotografías que son más lindas y preciosas que la tinta y el papel. Son las fotografías de la memoria agradecida, de la memoria amada y de la memoria amadora. Esas fotos no se vuelven amarillentas ni se hacen quebradizas, se vuelve parte del alma. Todos tenemos en un rincón del alma esas fotos. Mi buen Don Ata, dice en El Payador perseguido:


Mi tata era sabedor por lo mucho que ha rodao.

Y después que había cantao
destemplaba cuarta y prima,-cuerdas de su guitarra-
y le echaba un poncho encima
pa que no hable demasiado...

Volviendo y volviendo al desierto, después de un viajar y vagar por las llanuras argentinas, me queda un manojito de fotos en la memoria, de querencias que se quedarán junto a mi fogón y mi ventana.

-Inspirado por Atahualpa Yupanqui. El Payador perseguido.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Nada de eso sabemos

Tres muchachos pescadores tiburoneros se hicieron a la mar.En un abrir y cerrar de ojos estuvieron en una corriente marina.El combustible se agotó, se agotaron las probabilidades de dar media vuelta o salir de la corriente.Tuvieron de dos sopas o luchar contra la marea suicidamente o dejar que sus vidas fluyeran, confiando en ellos mismos, y en la sabiduría marina que los llevaría tarde,sí, un poco tarde, a buen puerto.Así pasaron 9 meses con sus noches.Vivieron de instante en instante. Fueron pacientes y sólo bebieron agua que el cielo les dio pese a estar en un mar de agua que no podían beber. Gaviotas y peces se acercaron y ofrecieron sus vidas para sostener las vidas de estos tres muchachos. No olvido que se llaman Luciano, Jesús y Salvador. Entrevistados, por los micrófonos anónimos, les preguntaron sobre su stress, su angustia existencial, su vivencia traumática. Estos muchachos se miraron unos a los otros hasta que uno de ellos, benévolamente, respondió ¿qué es todo esto que nos pregunta señorita? Nosotros nada de eso sabemos.Sólo pasábamos de momento en momento con la confianza de que a nuestro mar no se le teme pero se le respeta y, aunque tardara, su corriente nos llevaría a encontrarnos con alguien en el camino. Y así fue. Esas sesudas frases y conceptos se quedaron congelados en los micrófonos y en los gabinetes de los sesudos científicos.

martes, 19 de septiembre de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

El almendro

He dejado el desierto por un rato.Los vientos me han traído pasando por encima de las cordilleras y me he posado en la tierra argentina de la infinita llanura, del infinito verdor. La gran ciudad me recibe, pero aquí es invierno. Un cuarto piso. Un cuarto de hotel. Entre los altos edificios se cuela la mortecina claridad invernal del medio día. Una alegría me visita, la rama desnuda de un gran almendro besa el cristal de mi ventana.Alcanzo a distinguir una tímida yema, un tímido botón que guarda la certeza de una próxima primavera. Una vez más, la dureza del invierno austral marchará en retirada.La nueva vida se acerca, paso a paso. Algo despierta en mí. Me uno a ese andar, a ese júbilo creciente e interior que sabe que, no hay invierno tan poderoso que detener a la frágil y decidida primavera.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Como el sapo

Los humanos nos congratulamos por descender del homo humanus erectus, un ser evolucionado que tuvo dos privilegios.Primero, andar erguido, con la mirada hacia el horizonte, con los pies en la tierra y la capacidad de mirar al cielo estrellado y asombrarse. Segundo. El homo humanus erectus, además, se convirtió en el ser que camina, que hace senderos de ida y vuelta. La contraparte de este ser humano está formada por los seres que navegan en los aires y los que navegan en las aguas, así como otros mamíferos no humanos que poblaron la tierra. Entre todos estos seres vivos está el sapo. Del sapo se ha escrito abundantemente. Se destacan sus virtudes para controlar a las plagas que azotan a las plantas. También se señala que es bocón, que habla mucho y fuerte, sin olvidar que cuando se pone romántico canta en la orilla de la laguna y toca su guitarra.Es el sapo cancionero. Pero en estos tiempos también se dice, cuando algo está entrampado, y no avanza: estamos como los sapos que brincan y brincan pero caen en donde mismo, es decir, en el mismo lugar. O en otros términos, moverle a todo, para que nada cambie. Esta simulación de movimiento y cambio es una de las características de la vida política, hablando planetariamente.Pueba de ellos son los juegos de palabras que dicen, desdicen y contradicen, para que la realidad siga intacta.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

El pesado silencio

En mi refugio del desierto no hay teléfono ni Internet, la modernidad no ha llegado pero intuyo que pronto llegará. A pesar de ello mi viejo radio de onda corta -¡sí, todavía existen!- me pone en contacto, todas las noches, con el palpitar de nuestra nave planetaria en el lechoso mar de la galaxia.Me llegan las voces caribeñas, norteafricanas, sudamericanas, europeas y en todas ellas siento el ritmo del palpitar del mundo, pocas veces calmado. La mayor parte de las veces escucho en las noticias la angustiosa taquicardia, la acongojada respiración de los humanos desde los 4 rincones del mundo. En medio de esas noticias percibo una buena dosis de conformismo y hasta justificación de la situación social de millones de seres humanos.Por eso no ha pasado de moda y está vigente el decir de ese hombre -que pagó con su vida su atrevimiento al luchar por la no discriminación de sus compatriotas afro americanos en un país de blancos: Tendremos que arrepentirnos en esta generación, no tanto de las malas acciones de la gente perversa, sino del pasmoso silencio de la gente buena.

- Martín Luther King (1929-1968) pastor bautista afroamericano, luchardor por la no discriminación, la libertad del voto.Terminó asesinado.Recibió el Premio Nóbel de la Paz

viernes, 8 de septiembre de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Una puerta especial

Las obras humanas se conocen como obras de la cultura –cultivo- , es decir, fruto de las ciencias, técnicas y artes que aplicamos y cultivamos. Las demás obras son las de la Natura, las que se dan para nuestro asombro sin intervención nuestra como la lluvia los vientos, las mareas, el fuego, las migraciones de aves y ballenas, los ciclos estacionales y las sorpresas climáticas en los desiertos, cordilleras, selvas, bosques y lagos.
Las obras humanas están sujetas a la apreciación, valoración y juicio emitido por otros seres humanos. Sin embargo, las obras de la Natura son obras sin intencionalidad, son y nada más.Por eso las podemos apreciar con toda su frescura, belleza y transparencia. Un amanecer hoy es tan valioso como el primer amanecer del mundo.Un hombre sencillo que fue un gran botánico y especialista en árboles frutales, como el ciruelo y en tubérculos ,como la papa, dijo que

No hay otra puerta al conocimiento
Que la puerta que abre la naturaleza,
No hay otra verdad excepto
Las verdades que descubrimos
en la naturaleza.



- Inspirado en Luther Burbank (1849-1926) célebre botánico, de
Massachussets, por el ciruelo y la papa que que él desarrolló.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Una rama verde


La vida humana transcurre entre muchos afanes, deseos, anhelos, triunfos y derrotas.Cada cual sabe o, sabe a medias, cómo quiere vivir y para qué quiere vivir.En ese terreno no hay fórmulas ni matemáticas confiables.Lo que sí podemos ver en el talante de las personas es el aire que respiran en su interior y que de alguna manera se manifiesta en el exterior. Es hermoso ver a un anciano que no sólo conserva la lucidez de sus facultades sino también la chispa, el brillo en la mirada y el ánimo firme y generoso consigo y con los demás seres vivos.Este esbozo trazado con tantas palabras se resume, admirablemente, con un proverbio del budismo zen:

Si conservas verde una rama de tu corazón
un pájaro cantor llegará
y se posará en ella.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Frutos de la vida

En innumerables asuntos y problemas nos involucramos y complicamos la vida los humanos. Y así pasa el tiempo y nosotros a través de él. En medio de esos afanes se nos escapa algo importante, realmente y es descubrir que todos los animales, excepto el ser humano, saben que el principal negocio de la vida es disfrutarla. ¿O será que podemos aceptar que el principal negocio es venir a padecerla? Sin embargo no nos confundamos.No es sano buscar los sufrimientos por ellos mismos pero cuando representen nos fortalecerá el enfrentarlos directa y decididamente.



-Inspirado en Samuel Butler (1835-1902) Famoso escritor inglés, por su obra Erewhon, literatura de viaje y crítica a la sociedad victoriana neozelandesa.

domingo, 27 de agosto de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Contundente


¿Qué es lo interesante de hacer un viaje cruzando el desierto, navegando el océano, surcando lo vientos o alcanzando las altas cumbres? Para algunas personas lo importante es llegar, para otras ser el primero, no falta quien prefiera distinguirse por romper una marca de velocidad. Vuelvo la mirada y recuerdo a los dos primeros seres humanos que llegaron a la cumbre más alta -Everest o Chomolungma 28,029 pies- de nuestra nave en movimiento el planeta Tierra: Tenzing y Edmund Hillary. A ellos los acosaban, de día y de noche, con preguntas sobre numerosos aspectos de la ascensión y la conquista de la gran cumbre. Un día Hillary despejó las dudas y dijo: No es la montaña la que conquistamos sino a nosotros mismos. Ahí está la clave que distingue a los seres humanos. Unos escalan las montañas y nada más. Otros escalan las montañas y en el trayecto cumplen una gran tarea: conocerse un poco más así mismos.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Cielo

Cada cual imagina el cielo como quiere.Para algunos está más allá de esta tierra, en algún lugar en medio de nadal para otros el cielo es un estado de la conciencia y para muy pocos el cielo esta aquí, ahora y dentro de nosotros. El aquí de la vida es esta pequeña nave llamada la tierra que navega en la inmensidad del océano cósmico. Pues bien, hablando del cielo que está en nosotros, que está en esta tierra o pequeña nave, el gran Michelangelo Buonarroti dijo: Mi alma no puede encontrar una escalera al cielo a menos que sea a través de la amada Tierra.

- Michelangelo Buonarroti (1475-1564) Excelso pintor,escultor,arquitecto y poeta italiano del Renacimiento.





Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Hacer que suceda

Se trae agua desde grandes distancias en el desierto,
se mueven piedras inmensas y se levanta Macchu Pichuu,
se construyen ciudades, imperios,
se inventan mil y una cosas,
se curan mil y una enfermedades,
se viaja a través de mares, desiertos, rios, cañones,
se exploran los cielos y las profundidades el mar,
se cuidan ancianos y niños,
se trabaja en un bosque y
se salvan a los animales de un incendio pavoroso.

Millones de hombres y mujeres apuestan para la construcción de sociedades llamadas democráticas, donde no se apropie del poder un grupo, un clan, una tribu o un consejo de administración y menos un estado mayor militar, sino que el pueblo designe a sus genuinos representantes y la tarea de construcción se dé entre todos, todos los días.

Todas estas son algunas de las tareas humanas que llevan a millones a dedicar sus vidas en el esfuerzo de hacer que esta mundo avance y la vida tenga un sentido social.Ante este panorama podemos distinguir a tres grupos de seres humanos: hay gente que hace que las cosas sucedan, hay gente que mira cómo se hacen las cosas y hay gente que se maravilla por lo sucedido. Pero para que la vida tenga sentido, realmente, creo que necesitamos ser de las personas que hacen que las cosas sucedan.


-Inspirado en unas palabras del explorador James Lovell.

sábado, 19 de agosto de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Ir tan lejos...

Me voy de casa y me voy lejos, ya no los soporto. Esta frase la escuché hace años a un muchacho y a las pocas horas se marchó al norte, siempre al norte y se perdió en un rancho, allá en Nebraska. Pasaron los años y un día al salir de mi café mañanero, me lo encontré, como bajado del cielo, volteando la esquina. El muchacho se convirtió en un hombrón, como se dice por aquí. En el ínterin su padre falleció, no se vieron. Volví al café con él y después de escuchar con atención y emoción el relato de su viaje y la razón de su vuelta al desierto, me quedó no sólo el buen sabor del encuentro, del expreso corto y fuerte, sino una de las pocas certezas que me acompañan: El hombre viaja y cruza el mundo en búsqueda de lo que necesita y retorna a casa para encontrarlo.

-Inspirado en George Moore.