Han tiempos para estar en la tierra
hay tiempos para estar en el aire suspendido y
así me encuentro en este momento
de viaje desde el desierto hasta la orilla
del Río de la Plata.
Pausa breve, horizonte extendidos,
tiempo al tiempo
pocos días
que me hacen pensar en W.Blake
una hora puede ser como una eternidad
una eternidad puede ser sólo una hora
y se tiene en la palma de la mano
hasta otro rato...amigos queridos
Es una antología de las Cartas del Desierto que trasmito en Radio Universidad 105.3 FM y 1310AM, Chihuahua. Mexico. Una mirada sobre el mundo, la vida y la historia Social desde el desierto Chihuahuense en el Norte de México. Escribo y comparto mis sentires mientras vamos de camino: Si estas Cartas te ayudan y las reproduces, cita al autor y a la fuente. ¡Gracias por escribir tus comentarios¡ -La vida abre la puerta,nosotros hacemos el camino-
viernes, 12 de junio de 2009
viernes, 5 de junio de 2009
El papel
Dice un viejo proverbio oído en el desierto: El papel aguanta todo pero el pueblo no. Esta sabiduría nos recuerda que casi todo puede ser escrito o difundido por las señales de radio televisión o internet y el contenido puede ser falso y manipulador. Las obras humanas tienen sus límites y consecuencias. Pero llega el día en que los pueblos llegan a su máxima tolerancia y dicen basta. Ese día suele ser la transición entre la adolescencia y la adultez. La adultez es el tiempo de la vida marcado por el sentido de la propia responsabilidad que es intransferible. Por eso todo gobernante y comunicador ha de tener el debido respeto para quien es el origen de su poder temporal y a quien ha de servir.
jueves, 4 de junio de 2009
El hombre nuevo
Los nuevos jóvenes de espíritu en este mundo tienen ante sus ojos y antes sus brazos un desafío formidable en la tarea de humanizar las estructuras globales del mundo. No será fácil su navegación y les ayudará recordar a Odiseo quien mantuvo el rumbo fijo mientras se sucedían imponderables, aciertos, y errores. Por eso, Mario Benedetti nos alienta para tener en cuenta dos peligros: De dos peligros debe cuidarse el hombre nuevo: De la derecha cuando es diestra, de la izquierda cuando es siniestra.
miércoles, 3 de junio de 2009
Ayer,hoy,mañana
Durante años de mi vida mi contento fue aprender, leer, meditar. No me atrevía a escribir porque no tenía nada que decir. Pasaron muchas lunas e inviernos y un día descubrí los libros de ciencias y los libros de poesía. Aprendí que no existe el último y definitivo libro en esos campos. Liberado de ese peso tomé el papel, la tinta y las letras entre mis dedos. Hoy puedo contribuir con mi semilla, con mi granito de arena tomado de la gran playa. Cuando les llegue el tiempo darán fruto. No será necesario que yo esté en este mundo.
martes, 2 de junio de 2009
El mar y el príncipe
Allá en el gran desierto de la Mesopotamia donde el Tigris y el Éufrates se abrazan reza un proverbio que viaja de boca en boca hasta hoy: El mar no tiene vecinos, el príncipe no tiene amigos. Grande es el mar, grande es el príncipe y en su grandeza están con ellos mismos para unos o están solos, según el parecer de otros. Pero en el plano humano todos los mortales estamos necesitados unos de otros. Sentimos que la dicha llega cuando en nuestro viaje por la vida, se abren puertas y ventanas que facilitan nuestro mutuo caminar, porque somos el Homo Viator...
lunes, 1 de junio de 2009
Bicicleta
Una metáfora atribuida a Albert Einstein dice que la vida se parece a volar en avión. Suele suceder que se nos ofrece usar el sanitario. Después de usarlo, que es un gran alivio en la travesía, lo más importante es que lo dejemos igual de limpio o mejor para el siguiente pasajero. De eso se trata la vida humana. Somos huéspedes temporales y efímeros en este mundo de paso y por esa razón es un imperativo que cada generación humana deje este mundo a quienes nos sucederán o un poco mejor de cómo lo recibió de sus predecesores.
jueves, 28 de mayo de 2009
Tripas
Hay de urgencias a urgencias. Ella le dijo a él:
Necesito un abrazo tuyo. Un abrazo tan abrazo que me saque las tripas.
Queda la urgencia, la intensidad, la profundidad, lo íntimo y biológico sin adornos.
Necesito un abrazo tuyo. Un abrazo tan abrazo que me saque las tripas.
Queda la urgencia, la intensidad, la profundidad, lo íntimo y biológico sin adornos.
miércoles, 27 de mayo de 2009
El amigo Vino
Contaban en la antigua Mesopotamia, en nuestro hermano desierto, que un día llegó el Vino a este mundo. Unos supieron cómo beberlo y otros se perdían en él y morían bajo el rayo del sol. Un día, en una tienda en el desierto, los hijos le preguntaron al padre qué opinaba sobre la nueva bebida que había llegado a la tierra. El padre les dijo: El Vino ha llegado para ser nuestro amigo, así que lo hemos de tratar con afecto y respeto y nunca hemos de tirarlo al suelo y él tampoco nos arrojará por tierra.
viernes, 22 de mayo de 2009
Nunca te tengo tanto como cuando te busco...


En las paradojas del amor esta presente
el encuentro y el desencuentro
el ansia de estar y la ausencia
el casi tocar con la punta de los dedos y
lo inasible, lo imposible
Ana Rossetti dijo con nostalgia punzante:
Nunca te tengo tanto como cuando te busco
sabiendo de antemano que no puedo encontrarte.
Y en lugar de abandonarse se permite una búsqueda
desenfrenada como ésta:
Sólo entonces consiento estar enamorada.
Sólo entonces me pierdo en la esmaltada jungla
de coches o tiovivos, cafés abarrotados,
lunas de escaparates, laberintos de parques
o de espejos, pues corro tras de todo
lo que se te parece.
De continuo te acecho.
Es el paisaje urbano con su calles y sus tiendas
sus colores y aromas...todo le lleva a él.
El alquitrán derrite su azabache,
es la calle movible taracea
de camisas y niquis, sus colores comparo
con el azul celeste o el verde malaquita
que por tu pecho yo desabrochaba.
Pupila,piel,ojos,todo es instrumento para buscar,
para esperar el ansiado encuentro:
Deliciosa congoja si creo reconocerte
me hace desfallecer: toda mi piel nombrándote,
toda mi piel alerta, pendiente de mis ojos.
Indaga mi pupila, todo atisbo comprueba,
todo indicio que me conduzca a ti,
que te introduzca al ámbito donde sólo tu imagen
prevalece y te coincida y funda,
te acerque, te inaugure y para siempre estés.
el encuentro y el desencuentro
el ansia de estar y la ausencia
el casi tocar con la punta de los dedos y
lo inasible, lo imposible
Ana Rossetti dijo con nostalgia punzante:
Nunca te tengo tanto como cuando te busco
sabiendo de antemano que no puedo encontrarte.
Y en lugar de abandonarse se permite una búsqueda
desenfrenada como ésta:
Sólo entonces consiento estar enamorada.
Sólo entonces me pierdo en la esmaltada jungla
de coches o tiovivos, cafés abarrotados,
lunas de escaparates, laberintos de parques
o de espejos, pues corro tras de todo
lo que se te parece.
De continuo te acecho.
Es el paisaje urbano con su calles y sus tiendas
sus colores y aromas...todo le lleva a él.
El alquitrán derrite su azabache,
es la calle movible taracea
de camisas y niquis, sus colores comparo
con el azul celeste o el verde malaquita
que por tu pecho yo desabrochaba.
Pupila,piel,ojos,todo es instrumento para buscar,
para esperar el ansiado encuentro:
Deliciosa congoja si creo reconocerte
me hace desfallecer: toda mi piel nombrándote,
toda mi piel alerta, pendiente de mis ojos.
Indaga mi pupila, todo atisbo comprueba,
todo indicio que me conduzca a ti,
que te introduzca al ámbito donde sólo tu imagen
prevalece y te coincida y funda,
te acerque, te inaugure y para siempre estés.
jueves, 21 de mayo de 2009
Mario Benedetti: un luchador contra la hipocresía
Nota.- Como homenaje a mi querido Mario quien hace pocas horas ha transitado de este mundo visible transcribo las palabras de Marcos Roitman pues considero que son pertinentes e iluminadoras para comprender la talla humana de Mario Benedetti y que podamos ahondar en la riqueza de su obra y de su vida.
Marcos Roitman Rosenmann
"No tengo el don de la escritura; -dijo Benedetti- en ocasiones se tuerce y muchas veces es tosca, con ello convivo y busco superarlo. La necesidad de decir, y decir bien, obliga. Uno busca referentes para aprender. Pero no se trata de una cuestión de estilo. Junto a lo dicho debe haber un motor que impulse las palabras. Una seña de identidad. Octavio Ianni, sociólogo brasileño, me llamó la atención sobre escribir con seso, intestinos y corazón. Todo a la vez, crear un equilibrio entre un buen ensayo y una descripción agreste sin alma. Pablo González Casanova me ha recomendado la lectura de Antonio Machado, tanto como Jorge Luis Borges. Autores donde se refleja frescura y diversidad en el uso del lenguaje. Basta con recordar cómo inicia Machado la clase de poética y retórica de Juan de Mairena: “Señor Pérez, salga usted a la pizarra y escriba: ‘Los eventos consuetudinarios que acontecen en la rúa’... después de meditar, escribe: ‘Lo que pasa en la calle’.”
Conocer la gramática no lo es todo. Es necesario jugar con las palabras, transgredir las normas, buscar y recuperar significados. Impedir la condena de los conceptos fuertes evitando que la sociedad enmudezca. Transformar estética en obligación ética, en vivencia, conciencia crítica y transgresora. Forma y contenido entrelazados. No es una cuestión estilística, cuya meta se reduce a la soberbia de engrandecer egos y enaltecer la mezquindad del yo. Seguramente hay buenos estilistas, pero pocos artesanos de las letras, cuya coherencia les impide torcer el camino en medio de la batalla, negándose a ser víctima de la profecía cumplida y del tópico: “donde dije digo, digo Diego”.
Las palabras son un bisturí en manos de un buen médico; manipuladas por chapuzas, auguran lo peor. Se transforman en un amasijo somnoliento y pretencioso, pierden viveza. Suponen la muerte de la poética puesta en el lenguaje. El don de la escritura no puede ser una rutina. Benedetti amaba escribir para contar historias. Sus relatos captan el significado profundo del amor, el desengaño, la lucha política, la memoria. Son la esencia de la vida cotidiana, del alma y del cuerpo. Puso letra a todo cuanto es creación humana. Indagó la maldad. Se batió en duelo a la vieja usanza, con honor. No soportó la traición. Su trabajo consistía en llamar a las cosas por su nombre. Formas simples y llanas. Son méritos que convierten su vida y su obra en ejemplar.
No le valieron prendas para condenar la mentira, viniese de donde viniese y la dijera quien la dijese. Lo dicho quedó reflejado en el debate con Mario Vargas Llosa en 1984. Éste lo insulta, tildándolo de corrupto por defender las revoluciones sandinista y cubana, amén de considerarlo un robot alegre por apoyar el socialismo. Además se posesiona con una salida democrática al subdesarrollo y a las dictaduras, interpretación maniquea a la cual Benedetti responde demostrando coraje y algo de lo que carecía su contrincante: principios, altura de miras y dignidad. Los encabezados de su respuesta denotan su malestar: “Ni corruptos ni contentos” y “Ni cínicos ni oportunistas”.
En ellos subraya: “Me parece absolutamente legítimo que un escritor como Vargas Llosa se sienta tan presionado por la realidad como para pronunciarse sobre ella. La circunstancia de que muchos intelectuales latinoamericanos, a pesar de no practicar la obsecuencia ni la obediencia ciega que suele atribuirnos Vargas Llosa, mantengamos nuestra adhesión a las revoluciones de Cuba y Nicaragua no impide comprender que vanos aspectos de esas realidades hieran, vulneren o incluso descalabren ciertas pautas y arquetipos de otros intelectuales... A un intelectual del alto rango artístico de Vargas Llosa debe exigírsele una mínima seriedad en los planteos, particularmente cuando éstos ponen en entredicho la probidad de sus colegas. Hablar de corruptos y contentos en una región del mundo en la que hay tantos intelectuales perseguidos, prohibidos, exiliados... en ese marco de discriminación y de riesgo, de amenazas y de crimen es, por lo menos, una actitud insoportablemente frívola.”
Conocer la gramática no lo es todo. Es necesario jugar con las palabras, transgredir las normas, buscar y recuperar significados. Impedir la condena de los conceptos fuertes evitando que la sociedad enmudezca. Transformar estética en obligación ética, en vivencia, conciencia crítica y transgresora. Forma y contenido entrelazados. No es una cuestión estilística, cuya meta se reduce a la soberbia de engrandecer egos y enaltecer la mezquindad del yo. Seguramente hay buenos estilistas, pero pocos artesanos de las letras, cuya coherencia les impide torcer el camino en medio de la batalla, negándose a ser víctima de la profecía cumplida y del tópico: “donde dije digo, digo Diego”.
Las palabras son un bisturí en manos de un buen médico; manipuladas por chapuzas, auguran lo peor. Se transforman en un amasijo somnoliento y pretencioso, pierden viveza. Suponen la muerte de la poética puesta en el lenguaje. El don de la escritura no puede ser una rutina. Benedetti amaba escribir para contar historias. Sus relatos captan el significado profundo del amor, el desengaño, la lucha política, la memoria. Son la esencia de la vida cotidiana, del alma y del cuerpo. Puso letra a todo cuanto es creación humana. Indagó la maldad. Se batió en duelo a la vieja usanza, con honor. No soportó la traición. Su trabajo consistía en llamar a las cosas por su nombre. Formas simples y llanas. Son méritos que convierten su vida y su obra en ejemplar.
No le valieron prendas para condenar la mentira, viniese de donde viniese y la dijera quien la dijese. Lo dicho quedó reflejado en el debate con Mario Vargas Llosa en 1984. Éste lo insulta, tildándolo de corrupto por defender las revoluciones sandinista y cubana, amén de considerarlo un robot alegre por apoyar el socialismo. Además se posesiona con una salida democrática al subdesarrollo y a las dictaduras, interpretación maniquea a la cual Benedetti responde demostrando coraje y algo de lo que carecía su contrincante: principios, altura de miras y dignidad. Los encabezados de su respuesta denotan su malestar: “Ni corruptos ni contentos” y “Ni cínicos ni oportunistas”.
En ellos subraya: “Me parece absolutamente legítimo que un escritor como Vargas Llosa se sienta tan presionado por la realidad como para pronunciarse sobre ella. La circunstancia de que muchos intelectuales latinoamericanos, a pesar de no practicar la obsecuencia ni la obediencia ciega que suele atribuirnos Vargas Llosa, mantengamos nuestra adhesión a las revoluciones de Cuba y Nicaragua no impide comprender que vanos aspectos de esas realidades hieran, vulneren o incluso descalabren ciertas pautas y arquetipos de otros intelectuales... A un intelectual del alto rango artístico de Vargas Llosa debe exigírsele una mínima seriedad en los planteos, particularmente cuando éstos ponen en entredicho la probidad de sus colegas. Hablar de corruptos y contentos en una región del mundo en la que hay tantos intelectuales perseguidos, prohibidos, exiliados... en ese marco de discriminación y de riesgo, de amenazas y de crimen es, por lo menos, una actitud insoportablemente frívola.”
En la segunda entrega, tras nuevos insultos de Vargas Llosa, le recuerda su historia: “Hace ya unos cuantos años que mi tocayo señaló, con una imagen que hizo carrera, que la literatura ha de ser siempre subversiva y que el escritor debe ser una suerte de buitre que esté siempre dando vueltas sobre la carroña. Reconozco que mi vocación de buitre es prácticamente nula, y también la capacidad subversiva de la literatura es viable y defendible cuando el escritor distingue honestamente algo que subvertir, pero no como obligación eterna y menos como un deporte. Parece claro y elemental que si lucho por una sociedad más justa, cuando ese cambio, así sea primariamente, se produce, tratar de subvertir la situación equivaldría a proclamar una vuelta a la injusticia.”
La discusión se zanjó con la salida de Mario Benedetti de las páginas de opinión de El País. El Grupo Prisa y Juan Luis Cebrián, a la sazón director del matutino, decantaron la línea editorial hacia el peruano.
Mario Benedetti hace fácil lo difícil. Capta los valores y las vilezas de los mortales. Muestra, como en el ejemplo anterior, la cara de la traición, de la ignominia. Describió la muerte diseccionando las dictaduras y sus dictadores. No le hicieron falta títulos universitarios. Tampoco se inventó, como José Joaquín Brunner, ex ministro de Educación chileno, un falso titulo de sociólogo y posgrado en Oxford. Era un artesano de la palabra, un poeta. Siempre tuvo una sonrisa y no faltó a sus compromisos; se exigía con quienes sentía eran sus compañeros de viaje.
Mario Benedetti ha sido un hombre comprometido con su tiempo, y por ello fue perseguido. Su palabra resulta incomoda. Él supo el significado de un doble exilio. Enfrentó decretos de busca y captura. Desde la firma por el gobierno de Bordaberry el 27 de junio de 1973 llamando a los militares al poder, con un joven Julio María Sanguinetti en funciones de ministro, se abocó a denunciar las tiranías, sin dejar de escribirle al amor. Exiliado en Madrid, recibió el cariño de unos, los más, y el odio de la elite política. No le perdonaron vivir el Sur en el Norte, decir que también existía, reclamar derechos de autodeterminación y soberanía para los países que sufren la penetración imperialista. Hoy los hipócritas lloran su muerte. Por suerte, Benedetti fue claro: en el tiempo de la globalización, lo que se globaliza es la hipocresía.
La discusión se zanjó con la salida de Mario Benedetti de las páginas de opinión de El País. El Grupo Prisa y Juan Luis Cebrián, a la sazón director del matutino, decantaron la línea editorial hacia el peruano.
Mario Benedetti hace fácil lo difícil. Capta los valores y las vilezas de los mortales. Muestra, como en el ejemplo anterior, la cara de la traición, de la ignominia. Describió la muerte diseccionando las dictaduras y sus dictadores. No le hicieron falta títulos universitarios. Tampoco se inventó, como José Joaquín Brunner, ex ministro de Educación chileno, un falso titulo de sociólogo y posgrado en Oxford. Era un artesano de la palabra, un poeta. Siempre tuvo una sonrisa y no faltó a sus compromisos; se exigía con quienes sentía eran sus compañeros de viaje.
Mario Benedetti ha sido un hombre comprometido con su tiempo, y por ello fue perseguido. Su palabra resulta incomoda. Él supo el significado de un doble exilio. Enfrentó decretos de busca y captura. Desde la firma por el gobierno de Bordaberry el 27 de junio de 1973 llamando a los militares al poder, con un joven Julio María Sanguinetti en funciones de ministro, se abocó a denunciar las tiranías, sin dejar de escribirle al amor. Exiliado en Madrid, recibió el cariño de unos, los más, y el odio de la elite política. No le perdonaron vivir el Sur en el Norte, decir que también existía, reclamar derechos de autodeterminación y soberanía para los países que sufren la penetración imperialista. Hoy los hipócritas lloran su muerte. Por suerte, Benedetti fue claro: en el tiempo de la globalización, lo que se globaliza es la hipocresía.
miércoles, 20 de mayo de 2009
Despedida a Mario

La Jornada en Internet: Miércoles 20 de mayo de 2009
Eduardo Galeano,Daniel Viglietti y otros amigos cargaron
los restos corporales de nuestro querido Mario Benedetti,
para que descansen en paz junto a los de su esposa Luz López Alegría
Eduardo Galeano,Daniel Viglietti y otros amigos cargaron
los restos corporales de nuestro querido Mario Benedetti,
para que descansen en paz junto a los de su esposa Luz López Alegría
martes, 19 de mayo de 2009
Galeano y su amigo Benedetti
Nota.-
Es inevitable transcribir las sentidas palabras de
Eduardo Galeano en la partida de su amigo Mario Benedetti,
de las cuales me hago parte como una gota que llega al mar...
La Jornada: Mario Benedetti:
"Mario Benedetti por Eduardo Galeano
El dolor se dice callando.
Pero me pregunto:
¿qué será de nuestra ciudad,
sola de él?
¿qué será de Montevideo,mutilada de él?
Y me pregunto:
¿qué será de nosotros, sin su
bondad inexplicable?
Es inevitable transcribir las sentidas palabras de
Eduardo Galeano en la partida de su amigo Mario Benedetti,
de las cuales me hago parte como una gota que llega al mar...
La Jornada: Mario Benedetti:
"Mario Benedetti por Eduardo Galeano
El dolor se dice callando.
Pero me pregunto:
¿qué será de nuestra ciudad,
sola de él?
¿qué será de Montevideo,mutilada de él?
Y me pregunto:
¿qué será de nosotros, sin su
bondad inexplicable?
domingo, 17 de mayo de 2009
¿Qué les queda a los jóvenes? Mario Benedetti
"¿Qué les queda por probar a los jóvenes
en este mundo de paciencia y asco?
¿sólo grafitti? ¿rock? ¿escepticismo?
también les queda no decir amén
no dejar que les maten el amor
recuperar el habla y la utopía
ser jóvenes sin prisa y con memoria
situarse en una historia que es la suya
no convertirse en viejos prematuros
¿qué les queda por probar a los jóvenes
en este mundo de rutina y ruina?
¿cocaína? ¿cerveza? ¿barras bravas?
les queda respirar / abrir los ojos
descubrir las raíces del horror
inventar paz así sea a ponchazos
entenderse con la naturaleza
y con la lluvia y los relámpagos
y con el sentimiento y con la muerte
esa loca de atar y desatar
¿qué les queda por probar a los jóvenes
en este mundo de consumo y humo?
¿vértigo? ¿asaltos? ¿discotecas?
también les queda discutir con dios
tanto si existe como si no existe
tender manos que ayudan / abrir puertas
entre el corazón propio y el ajeno /
sobre todo les queda hacer futuro
a pesar de los ruines de pasado
y los sabios granujas del presente."
en este mundo de paciencia y asco?
¿sólo grafitti? ¿rock? ¿escepticismo?
también les queda no decir amén
no dejar que les maten el amor
recuperar el habla y la utopía
ser jóvenes sin prisa y con memoria
situarse en una historia que es la suya
no convertirse en viejos prematuros
¿qué les queda por probar a los jóvenes
en este mundo de rutina y ruina?
¿cocaína? ¿cerveza? ¿barras bravas?
les queda respirar / abrir los ojos
descubrir las raíces del horror
inventar paz así sea a ponchazos
entenderse con la naturaleza
y con la lluvia y los relámpagos
y con el sentimiento y con la muerte
esa loca de atar y desatar
¿qué les queda por probar a los jóvenes
en este mundo de consumo y humo?
¿vértigo? ¿asaltos? ¿discotecas?
también les queda discutir con dios
tanto si existe como si no existe
tender manos que ayudan / abrir puertas
entre el corazón propio y el ajeno /
sobre todo les queda hacer futuro
a pesar de los ruines de pasado
y los sabios granujas del presente."
Un amigo, un hermano . José Saramago. El gran cronista de los sentimientos
Nota.- Con grande afecto me uno a las palabras de nuestro queridísimo José Saramago para agradecerle a la vida que nos prestó a la preciosa vida de Mario Benedetii desde 1920 hasta el día de hoy.
"La obra de Mario Benedetti, amigo, hermano, es sorprendente en todos los aspectos, ya sea por la extensión en la variedad de géneros que toca, ya sea por la densidad de su expresión poética como por la extrema libertad conceptual que usa. El léxico de Benedetti ha ignorado deliberadamente la supuesta existencia de palabras 'poéticas' y de otras que no lo son. Para Benedetti, la lengua, toda ella, es poética. Leída desde esta perspectiva, la obra del gran poeta uruguayo se nos presenta, no sólo como suma de una experiencia vital, sino, sobre todo, como la búsqueda persistente y lograda de un sentido, el del ser humano en el planeta, en el país, en la ciudad o en la aldea, en su casa simplemente o en la acción colectiva. Son muchas las razones que nos llevan a la lectura de Benedetti. Tal vez la principal sea ésa, precisamente: que el poeta se ha convertido en voz de su propio pueblo. O sea, en poeta universal.
Mario Benedetti
Nacimiento: 14-09-1920 Lugar: (Montevideo)
Tránsito de este mundo visible al invisible : Hoy Domingo 18 de Mayo de 2009
"La obra de Mario Benedetti, amigo, hermano, es sorprendente en todos los aspectos, ya sea por la extensión en la variedad de géneros que toca, ya sea por la densidad de su expresión poética como por la extrema libertad conceptual que usa. El léxico de Benedetti ha ignorado deliberadamente la supuesta existencia de palabras 'poéticas' y de otras que no lo son. Para Benedetti, la lengua, toda ella, es poética. Leída desde esta perspectiva, la obra del gran poeta uruguayo se nos presenta, no sólo como suma de una experiencia vital, sino, sobre todo, como la búsqueda persistente y lograda de un sentido, el del ser humano en el planeta, en el país, en la ciudad o en la aldea, en su casa simplemente o en la acción colectiva. Son muchas las razones que nos llevan a la lectura de Benedetti. Tal vez la principal sea ésa, precisamente: que el poeta se ha convertido en voz de su propio pueblo. O sea, en poeta universal.
Mario Benedetti
Nacimiento: 14-09-1920 Lugar: (Montevideo)
Tránsito de este mundo visible al invisible : Hoy Domingo 18 de Mayo de 2009
Lección aprendida y aplicada
Luisito, un niño vivaracho de 9 años estuvo en su clase de geografía dedicada al estudio del Polo Sur y del Polo Norte de nuestro planeta. El niño le preguntó a su profesor ¿Cuántos kilómetros hay desde el Polo Sur hasta el Polo Norte? La respuesta no tardó: ¡20 mil kilómetros! Esa tarde Luisito escribió en la mitad de un sobre de papel de reuso a su novia - una niña pelirroja salpicada de pecas como un hermoso archipiélago: Mi amor mide 20 mil kilómetros. Te amo del Polo Sur al Polo Norte y además de ida y vuelta.
viernes, 15 de mayo de 2009
En el otoño austral
El mes de marzo lo tengo asociado desde niño, por haber nacido en la región austral del mundo, con la aventura de la conquista del Polo Sur –el desierto blanco de nuestro mundo. En mi mente infantil se erigieron como gigantes, como titanes, las figuras de Roald Amundsen, noruego y su equipo y la de R.Scott, inglés con sus expedicionarios. Los primeros llegaron un mes antes –en el otoño austral- y dejaron provisiones y un trineo para Scott y sus compañeros. Supe entonces del trágico fin de toda la expedición de R.Scott pero eso no les quitó generosidad y talla humana. Su sacrificio los engrandeció. Desde entonces han quedado grabadas en mi alma las últimas palabras escritas por Scott que son una súplica: Viernes 29 de marzo. Afuera, delante de la puerta de la tienda, todo el paisaje es una terrible ventisca. Resistiremos hasta el final; la muerte ya no puede estar lejos: es una lástima, pero no creo poder seguir escribiendo. R. Scott. Por el amor de Dios, cuidad de nuestras familias. Y añadió con estremecedora conciencia de su tránsito inminente: envíen este diario a mi viuda.
En el otoño austral

El mes de marzo lo tengo asociado desde niño, por haber nacido en la región austral del mundo, con la aventura de la conquista del Polo Sur –el desierto blanco de nuestro mundo. En mi mente infantil se erigieron como gigantes, como titanes, las figuras de Roald Amundsen, noruego y su equipo y la de R.Scott, inglés con sus expedicionarios. Los primeros llegaron un mes antes –en el otoño austral- y dejaron provisiones y un trineo para Scott y sus compañeros. Supe entonces del trágico fin de toda la expedición de R.Scott pero eso no les quitó generosidad y talla humana. Su sacrificio los engrandeció. Desde entonces han quedado grabadas en mi alma las últimas palabras escritas por Scott que son una súplica: Viernes 29 de marzo. Afuera, delante de la puerta de la tienda, todo el paisaje es una terrible ventisca. Resistiremos hasta el final; la muerte ya no puede estar lejos: es una lástima, pero no creo poder seguir escribiendo. R. Scott. Por el amor de Dios, cuidad de nuestras familias. Y añadió con estremecedora conciencia de su tránsito inminente: envíen este diario a mi viuda.
jueves, 14 de mayo de 2009
Ahora, de cincuenta en adelante
¿Y ahora qué, cómo y cuándo? Sí, lo que nunca imaginamos que existiera, como hacerse viejo, tomar la bufanda y partir de este mundo, es lo que llamamos el presente. ¿Qué dijo el buen Benedetti al respecto?
Ahora veteranos
ya le dimos alcance a la verdad
el océano es por fin el océano
pero la muerte empieza a ser
la nuestra.
Sí, ya partieron los grandes y hemos quedado en la proa del barco de frente al amplio mar y el mar es mar, aunque en la memoria del corazón este mar habita en el pequeño charco de la lluvia veraniega que fue para mí todo el océano. La muerte, sí, la llamada muerte ahora es alguien con quien puedo conversar y contemplar aquí en la proa del barco y ante el amplio mar.
Ahora veteranos
ya le dimos alcance a la verdad
el océano es por fin el océano
pero la muerte empieza a ser
la nuestra.
Sí, ya partieron los grandes y hemos quedado en la proa del barco de frente al amplio mar y el mar es mar, aunque en la memoria del corazón este mar habita en el pequeño charco de la lluvia veraniega que fue para mí todo el océano. La muerte, sí, la llamada muerte ahora es alguien con quien puedo conversar y contemplar aquí en la proa del barco y ante el amplio mar.
lunes, 11 de mayo de 2009
Muchachos
¿Qué fue ser muchacho? ¿Cómo fue nuestro mirar y nuestro sentir? El mundo se ensanchó y comenzaron a revolotear las preguntas por la vida y sus misterios. Frente a la muerte y el morir pesó más todavía el lenguaje y no la experiencia. Nos dábamos el gusto de sostener conversaciones sobre la muerte aún lejana y ajena…lo que no supimos es que eso duraría poco tiempo al decir de mi buen Benedetti.
Cuando éramos muchachos
los viejos eran gente de cuarenta
un estanque era un océano
la muerte solamente
una palabra
Cuando éramos muchachos
los viejos eran gente de cuarenta
un estanque era un océano
la muerte solamente
una palabra
jueves, 7 de mayo de 2009
Cada tiempo
Etapas de la vida. Cada tiempo tiene su mirada y su sentir sobre la vida. Como Benedetti solemos decir:
Cuando éramos niños
los viejos tenían como treinta
un charco era un océano
la muerte lisa y llana
no existía.
Para los niños el mundo es elástico y los miedos se podían guardar en un frasquito y los viejos fueron los que ya terminaban la secundaria cuando yo llevaba pantalones cortos. Cuando éramos niños, fuimos inmortales de corazón y de pensamiento y de acción pues pensaba que nada grave me podía suceder realmente. ¡Ah sí! El océano podía ser un charco de lluvia en el verano, una pileta, un canal o acequia de riego,allá en la cordillera de los Andes.
Cuando éramos niños
los viejos tenían como treinta
un charco era un océano
la muerte lisa y llana
no existía.
Para los niños el mundo es elástico y los miedos se podían guardar en un frasquito y los viejos fueron los que ya terminaban la secundaria cuando yo llevaba pantalones cortos. Cuando éramos niños, fuimos inmortales de corazón y de pensamiento y de acción pues pensaba que nada grave me podía suceder realmente. ¡Ah sí! El océano podía ser un charco de lluvia en el verano, una pileta, un canal o acequia de riego,allá en la cordillera de los Andes.
miércoles, 6 de mayo de 2009
Matar y guerrear
Nuestro querido lenguaje está lleno de expresiones bélicas y eso no es sorpresa para nadie. Como muestra pensemos en el verbo matar y en hacer la guerra. De ahí deriva una lista casi infinita de guerras que libramos cada día. Guerra contra la pobreza, contra las enfermedades, contra la corrupción, guerra contra la guerra, guerra contra la gordura y la corrupción, guerra contra la contaminación del planeta y guerra contra los políticos. Por otro lado está el verbo Matar. Matar el hambre decimos a media mañana, matar el tiempo, matarse por llegar a tiempo o matarlo a uno con la mirada, matarse trabajando y matarse por amor. Hoy sólo me ocupo de “matar el tiempo”. ¿Qué mal ha hecho el buen tiempo para tener tantos enemigos que le quieren matar? Hoy sólo deseo tener un buen detalle con el tiempo y agradecerle porque los tiempos llamados muertos me han dado mucha vida, minutos preciosos de lectura mientras espero la fila en el banco o el avión. No, el tiempo no se merece que lo matemos sino que veamos en él a un amigo que nos regala miles de instantes luminosos para que tomemos de ellos a manos llenas. Y andando el tiempo esos minutos se convierten en vida plena, o tal vez en unas líneas como estas que no son escritas “para matar el tiempo” sino para honrarlo como se hace con el mejor amigo.
martes, 5 de mayo de 2009
Natural y extraordinario

Dijo Miguel Ángel el gran escultor, arquitecto, pintor y hombre polifacético del renacimiento italiano: Me ha costado tanto esfuerzo y tantos años llegar a dominar mis artes que si la gente supiera, no verían mis obras como algo asombroso sino como el producto natural de una vida disciplinada y entregada con pasión a lo que ama. Dicho en lengua sencilla, lo que a nosotros nos parece extraordinario le parece algo natural a Miguel Ángel quien dedicó su vida al cultivo de su parcela.Unos escriben, otros hacen ciencia y otros el arte.Pero todos tienen en común que los resultados naturales son consecuencia de una vida entregada. Nos asombra escuchar una voz potente, armónica y entusiasta que pareciera que sin esfuerzo alguno se eleva en el aire y nos envuelve con su magia.Esa voz se formó,maduró,se pulió pacientemente, hasta llegar a ser tan pura y cristalina como una gota de agua.
sábado, 2 de mayo de 2009
Soy, gracias a ti
En el habla cotidiana expresamos nuestra gratitud con frases como: Gracias a ti soy el que soy. Es de nobleza ser agradecido. El cariño, la bondad de otros dejan huella en nosotros y les podemos decir, un día, Muchas gracias por ser, ¡Muchas gracias por existir! Es una afirmación limpia transparente decir que soy gracias a ti – tal vez águila. Tal vez este descubrimiento le llevó a nuestro siempre inolvidable Julio a exclamar:
Creo que soy porque te invento,
alquimia de águila en el viento
desde la arena y las penumbras[1]
Creo que soy porque te invento,
alquimia de águila en el viento
desde la arena y las penumbras[1]
[1] Julio Cortazar. Doble invención.
Soy, gracias a ti
En el habla cotidiana expresamos nuestra gratitud con frases como: Gracias a ti soy el que soy. Es de nobleza ser agradecido. El cariño, la bondad de otros dejan huella en nosotros y les podemos decir, un día, Muchas gracias por ser, ¡Muchas gracias por existir! Es una afirmación limpia transparente decir que soy gracias a ti – tal vez águila. Tal vez este descubrimiento le llevó a nuestro siempre inolvidable Julio a exclamar:
Creo que soy porque te invento,
alquimia de águila en el viento
desde la arena y las penumbras[1]
Creo que soy porque te invento,
alquimia de águila en el viento
desde la arena y las penumbras[1]
[1] Julio Cortazar. Doble invención.
Testamentos
Un asunto muy sensible entre las familias es hablar de la Herencia que se dejará a los familiares sean queridos o no tan queridos. Lo cierto del caso es que a veces invertimos mucha energía en elaborar precisas divisiones para adjudicarle a cada quien su parte. No contentos con ello, los heredados entran en amargas controversias y disputas. Sin embargo, se nos olvida que uno puede hacer un testamento aunque nada material tenga para heredar. Me refiero al testamento amoroso y espiritual donde uno puede dejar por escrito los sentimientos más queridos para los seres amados llegando hasta parientes lejanos y amigos. Esta necesidad puede tener diverso origen, como puede ser el deseo de ser reconocido, pero cuando se hace con recta intención es algo de lo mejor que podemos dejar a quienes se quedarán andando el camino de la vida por un rato más, después de que partamos nosotros de este mundo visible.
jueves, 30 de abril de 2009
De la cabeza a las piernas
Estuvimos conversando entre amigos de este desierto acerca de las virtudes de los vinos. Uno se inclinaba incondicionalmente por el vino tinto y otro por el vino blanco y no faltó un tercero que intentara convencer con las escondidas cualidades del vino rosado. Se tocaron varios aspectos destacando la combinaciones, las propiedades, la manera de tomarlos y no faltó la observación sobre cuál de ellos se trepa más rápido a la cabeza. etc. En el grupo estaba un viejo amigo italiano conocedor, por experiencia, del tema y terció así: "Amigos míos carísimos, el problema de los vinos no es que se trepen a la cabeza como dicen casi todos los bebedores, el problema es que el vino se baje a las rodillas, por ahí es donde uno se tambalea y se cae. Así que en adelante es más preciso decir el vino se me fue a las piernas."
miércoles, 29 de abril de 2009
El color de la vida
¿De qué color es la vida? Esta pregunta se me ha presentado sin venia ni permiso mientras estoy escribiendo sobre astros planetas y telescopios- Tal vez sea porque hace unos segundos pasó por mi mente y debajo de mi piel la voz de Edith Piaf cantando La vida en rosa. Sí, aunque para ella la vida no fue en rosa precisamente, la vida suele tomar el color que le asignamos. Para unos la vida es un túnel en negro y para otros la vida es de un gris interminable. Mas para algunos seres humanos la vida se presenta de vez en cuando como el arco iris y nos regala la oportunidad de elegir nuestro color predilecto como un niño elige el color de los caramelos o el sabor de un helado. Me pregunto ¿cuál es el color de la vida para mí? Descubro que es el color de la luz, sí, la luz clara y brillante de un día soleado en el desierto. Este es el color de la vida para mí. Tal vez porque la luz contiene todos los colores y a ninguno excluye. Mi vida ha viajado, como el sonido, a través de toda la escala cromática. Eso me hace sentirme un ser feliz.
Kepler
Mientras escribo me acompaña Kepler, un telescopio para asomarse y ver los 100 mil millones de estrellas de nuestra Vía Láctea para buscar infatigablemente un pequeño planeta parecido a nuestra nave.Kepler vive y late a 700 kilómetros de altura. En su viaje a través de los cielos estrellados registra la armonía de las esferas celestes. Aquí, abajo, andamos perdidos y extraviados. ¿Qué nos curará, pregunto? Anoche me he asomado al cielo nocturno del desierto y el silencio me ha traído lentamente el suave himno de la Harmonia Mundi, la armonía de los mundos- Esa armonía nos sana, nos recuerda que nuestra tarea es armonizar la convivencia humana que hemos perdido en alguna esquina, en algún terreno baldío.
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