El sentimiento de admiración , asombro y
reverencia que sentimos los seres humanos para las fuerzas naturales encarnadas
en las olas, el huracán, la tormenta de arena, la nevada , el arcoiris, los
truenos y rayos y un nutrido etcetera nos han llevado ha establecer una suerte
de filiación que desde muchos sigles atrás se resume con el título: Ser hijos
de. En nuestro desierto es el Viento el que se enseñorea y es común que muchos
grupos humanos se identifiquen con el Viento llamandose: Hijos del viento. Este
título alude a la fuerza y a la transparencia del Viento. Pero destaca su
carácter de Señor con equipaje ligero, Señor
que hoy está con nosotros y mañana muy lejos de aquí. El viento descansa en una
ligera tienda junto con los humanos y
nos enseña a caminar en su alas siendo de pies ligeros y alma liviana -desapegada
como el viento, de tantos apegos que genera nuestra condición terrestre.
Es una antología de las Cartas del Desierto que trasmito en Radio Universidad 105.3 FM y 1310AM, Chihuahua. Mexico. Una mirada sobre el mundo, la vida y la historia Social desde el desierto Chihuahuense en el Norte de México. Escribo y comparto mis sentires mientras vamos de camino: Si estas Cartas te ayudan y las reproduces, cita al autor y a la fuente. ¡Gracias por escribir tus comentarios¡ -La vida abre la puerta,nosotros hacemos el camino-
lunes, 9 de noviembre de 2015
domingo, 8 de noviembre de 2015
Tambor del desierto
En una pequeña escuela primaria en nuestro
desierto la maestra dedicó la clase a los instrumentos musicales y ese día le
tocó al “tambor”. ¿Cuándo y cómo nació
el tambor? preguntó. Una niña comentó. “Nació
el día en que pusimos la palma de nuestra mano sobre nuestro corazón y
descubrimos que ahí esá el tambor de la vida” Según laten nuestros sentimientos
y emociones nuestro pequeño tambor vibra. Ese es el primer instrumento de la
vida humana. Cada vez que escuchamos un tambor nuestro corazón se agita. Hay
tambores y tambores y anuncian alegrías, trsitezas,combates,gritos de
guerra,partidas,emociones intensas como la victoria y el asombro redoblado ante
los portentos del cielo. En el cielo los tambores de los truenos, en nuestro desierto,
en la tierra el tambor de nuestro corazón.
sábado, 7 de noviembre de 2015
Mañana soleada de sábado en el desierto
Una mañana soleada de sábado. El naranjo pequeño en su maceta luce el esplendor de sus naranjas a punto. Todo el universo habita en una naranja:el sol, el viento, el agua,la tierra y los sentimientos
humanos. ¿Cuál es el propósito de vida para el naranjo? Uno. Dar naranjas para nosotros. El naranjo no prueba ni uno solo de sus frutos. Todo lo da, lo dona, lo regala. ¿Cómo es posible tanta generosidad? Su mismísimo ser y todos sus frutos son para nosotros. El naranjo pequeño. -con su auto trascendencia- me ha dejado sin palabras en esta mañana soleada de sábado.
viernes, 6 de noviembre de 2015
¿Qué pasa con los otros?
Un hijo de un amigo muy querido en el pueblo
cayó gravemente enfermo y los médicos y la gente pensó que no sobreviviría. La
gente del poblado pequeño quería mucho al niño y se reunió en la capilla del
pueblo -durante algunas tardes- para rezar por él y para que recuperara la
salud y volviera la alegría a su familia. Cuando el niño dio señales de mejoría
,la gente fue con su papá a felicitarlo,pero el papá del niño estaba triste. La
gente le preguntó por la causa de su tristeza y el papá dijo: Mi niño querido
ha mejorado gracias a que ustedes se reunieron y rezaron y se los agradezco de
corazón ,pero ¿qué pasa con los otros niños?.
Cuando se enferman la capilla no tiene gente que se reuna, ni que rece
por ellos. -Historia del desierto que me
contó mi amigo David.
jueves, 5 de noviembre de 2015
Dentro de nosotros
Los seres humanos sabemos que hay dos tipos de sufrimientos: los inevitables propios de nuestra naturaleza propiciados por el nacimiento,el crecimiento,la enfermedad y el tránsito final. Los sufrimientos evitables son todos los causados por nuestras decisiones propias. Cuando indagamos en nuestros sufrimientos personales y lo hacemos sincera y detenidamente casi siempre encontraremos la raíz de lo que nos hace sufrir y los frutos que levantamos. En este horizonte es muy sabia la anotación del buen Albert Schweitzer: "Cada ser humano sufriente lleva dentro de sí a su propio médico".
miércoles, 4 de noviembre de 2015
El desierto y sus tesoros
Para vivir y sobrevivir en el desierto es necesario tener conocimiento, actitud, y
determinación. Saber cómo se comportan los vientos, de dónde viene y adónde va
la tormenta de arena, a qué hora baja el frío y cómo se anuncia el hielo,la
nieve y el frío así como el calor extremo y sus efectos. Hay que ver el cielo
todos los días y explorar las nubes ,observar el grado de humedad y sobretodo
saber dónde está el tesoro del agua,
emplearla,cuidarla. Hay una antigua distinción entre ciencia y sabiduría y la
resumimos asi: “El sabio no es aquel que sabe
dónde esta el tesoro, sino el que trabaja y lo saca”
martes, 3 de noviembre de 2015
Gracias a nuestros muertos
En el perpetuo retorno de la rueda de la
memoria del corazón en nuestro desierto está la realidad de vida que necesita
de la muerte y la muerte que posibilita a la vida. Cada año celebramos este encuentro
entre el mundo visible y el invisible. La nota de la hospitalidad,el amor, y la
serenidad permea el ambiente de estos días en que disfrutamos el reencuentro
con nuestros seres amados. Tomo las palabras de nuestro querido García Lorca de
ese 1931 visitando a su pueblo Fuente Vaqueros: “Un saludo a todos. A los vivos
y a los muertos, ya que vivos y muertos componen un pais. A los vivos para
desearles felicidad y a los muertos para recordarlos cariñosamente porque
representan la tradición del pueblo y porque gracias a ellos estamos todos aquí.”
Escondido en el desierto
Los tiempos difíciles en nuestra vida se comparan con el tránsito en un túnel y se abriga la esperanza diciendo que por más largo y oscuro que sea veremos la luz al final y por ello no hay que darse por vencido ,no detenerse más que lo indispensable y ser perseverante. En nuestro desierto sucede algo similar pues nuestros ancestros nos han legado esta afirmación: Por más grande que sea un desierto siempre esconde un oasis que calmará nuestro cansancio. Las rutas trazadas han sido cuidadosas en registrar esos pedazos de cielo en la tierra cuando se encuentra un pequeño manantial, una sombra. No necesitamos esperar hasta el final de la vida para comprender que será el cielo pues quien ha llegado a un oasis puede comprender la plenitud de los trabajos de la vida ,el descanso íntimo y reparador,la comunión agradecida con nuestro universo y con todos los peregrinos de la vida que pasaron antes que nosotros e hicieron camino para nosotros. ¿Que haremos para quienes vienen detrás de nosotros?
domingo, 1 de noviembre de 2015
Veleta del desierto
La Veleta madruga, vive bajo el rayo del sol, la agitan los vientos soporta la nieve,el rayo y por si fuera poco las frases displicentes: "Eres un veleta,no tienes norte", "Sos un veleta títere de los vientos", "Eres como la veleta, voluble,inestable,cambias de opinión y sentimiento". Esta es una muestra de ignorancia. La Veleta trabaja incansable para guiar al navegante de tierra , de aire y de mar. La mar en calma hace que la Veleta esté quieta, casi muerta. La veleta habla moviéndose y nos dice del viento del sur mañanero y del viento de norte vespertino. La veleta es una suerte de magia que hace que veamos lo invisible:el viento. La veleta le presta voz,manos y pies a los vientos.En nuestro desierto la veleta, esa flecha apuntadora, lleva la silueta de un gallo madrugador para recordarnos que trabaja de sol a sol y anuncia con su girar el nuevo día.En nuestros polvorientos caminos surge su inconfundible silueta en la parte alta de las casas de rancho y despierta en mí una alegría que mantiene viva mi admiración infantil -como quien disfruta un juguete de lo más útil y sencillo que ha creado la mente humana.
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