lunes, 30 de octubre de 2006


Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

La querencia

Unos llaman Patria chica al lugar donde nacieron y razón les asiste pues patria quiere decir la tierra de nuestros padres. El cantar a la patria chica es ritual universal. Nos referimos también a la patria chica como mi pueblo, terruño, aldea, villa, o pago. Para muestra un botón y no olvidemos a Jorge Luís Borges quien al volver de Europa en 1923 a su patria escribió el inolvidable poemario Fervor de Buenos Aires. Otro coterraneo, Don Ata, escribió un poema-canción llamado Querencia y dice así:

Todos hablan de su pago como si fuera el mejor.
Mi querencia es el camino bajo la luna y el sol (…)
Se llena mi voz de estrellas y
el viento arrastra las nubes y
me vuelvo todo niebla.
Yo soy de un pago muy lejos.
Mi pago se llama…Huella,
mi amor se llama Guitarra, y
mi caballo…Paciencia.

Estos dos hombres supieron sentir el amor a su barrio y a su pago hondamente, y supieron ser, universales, como para abrazar al mundo.


-Inspirado en Atahualpa Yupanqui. Guitarra. Poemas y cantares argentinos. Querencia, p.63

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

El doble acierto

Cuentan que un emperador del desierto de Gobi, fue a consultar a un vidente afamado y le preguntó si él ganaría la próxima guerra que estaba preparando contra sus enemigos. El vidente guardó silencio, durante un tiempo, y le dijo: No, no ganarás esa guerra. La noticia le cambió la cara al emperador y se tornó enfurecida. El emperador le dijo al vidente: Puesto que eres muy hábil para predecirme el futuro ¿podrías decirme cuándo será el día de tu muerte? El vidente guardó silencio durante un tiempo y le dijo al emperador con gran serenidad: Hoy será mi último día en este mundo, y se retiró. El tirano emperador le gritó: Muy bien, vidente, acertaste en las dos cosas, te felicito. Ese día el tirano mandó que le cortaran la cabeza al afamado vidente que se atrevió a decirle la verdad. No ganarás esa guerra.

-Inspirado en un antiguo cuento del desierto de Gobi.

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

En lo alto

Las cumbres de las lomas, de las sierras o de los grandes nevados tienen la peculiaridad de brindarnos el descanso, el sosiego y hasta instantes de paz.En lo alto los instantes se pueden vivir, como eternidad y también, la eternidad, la podemos sentir como un parpadear. En lo alto, podemos viajar si movernos pues todo el universo cabe en el más pequeño de los bolsillos de nuestra alma.Los espacios libres, en lo alto, permiten que nuestro ser se viva como gota en el mar.Nos diluimos y, sin dejar de ser, nosotros, nos olvidamos por unos instantes de quiénes somos, pues estamos absortos en el contemplar… desde lo alto. Don Ata en sus andanzas, unidas a su guitarra, como un pañuelo que nos enlaza en el corazón, cantó un día así:

En lo alto de la sierra
me detuve a descansar;
pero sentí que me iba…
sin moverme del lugar.

Los ojos se me perdieron
en aquella inmensidad,
y me olvidé de mi mismo
tanto mirar y mirar…

La fascinación de lo alto, nos permite unir el cielo con la tierra. Podemos ver la pequeñez de los grandes problemas humanos y desde nuestra pequeñez tocar el cielo.

- Inspirado en Atahualpa Yupanqui. Guitarra- Poemas y cantares argentinos. El Cielo. p, 75

jueves, 26 de octubre de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

La victoria alada


Tuve una tía, no bien querida de origen griego, que se llamó Niké. Niké para aquí y Niké para allá.Pero, un día, en una clase de etimologías griegas me topé, nuevamente, con el recuerdo de la malhadada tía Niké que se transfiguró en Niké, la diosa de la Victoria. Ahondando en la diosa navegué, no en Internet que ni en sueños la hacía, sino en la enciclopedia familiar más portátil de entonces, El Pequeño Larousse. Fue un amor a primera vista, un amor fulminante sentí al contemplar a la Victoria alada de Samotracia -su nombre completo- una deslumbrante escultura marmórea de 2.40 metros de altura. Niké fue descubierta en 1863 en la isla de
Samotracia por el cónsul francés, Charles Champoiseau, arqueólogo aficionado. La hermosura pasmosa de Niké se halla interrumpida pues su cabeza fue mutilada y ha de vivir en el fondo del mar. La Victoria de Samotracia simboliza, para mí, que la victoria, no se le concede a nadie en propiedad ni en perpetuidad. La victoria es el gozo de un instante que ,en el instante siguiente, levanta el vuelo. Más aún, lo que en un instante es fracaso en el instante siguiente se convierte en Victoria y así sucesivamente.La Niké tuvo como destino la proa de un barco de guerra griego pero nunca llegó a ser instalada y hoy preside un recinto especial en el Louvre de Paris. La victoria mutilada evoca una realidad: todos podemos ser victoriosos sobre nuestras debilidades, cobardías y limitaciones y levantar el vuelo hasta los espacios libres, en el horizonte marino de nuestra vida.Circunstancia sorprendente es que la Victoria decapitada y alada comparte su gloria y esplendor, en el museo del Louvre, con la amada Venus de Milo con sus brazos mutilados. Niké y la Venus son un llamado para que nosotros completemos con nuestra vida lo que ellas perdieron: el rostro y los brazos.Hoy existen millones de seres humanos que son los sin rostro porque nada valen y millones de brazos que no encuentran trabajo.

- Niki tis Samothrakis (Νίκη της Σαμοθράκης)
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Bordoneando y escribiendo

Bordonear es el arte de los guitarreros que tocan las cuerdas más bajas y roncas de su guitarra. El bordoneo puede ser hasta un susurro al oído unas veces sedecutor, galante, o portador de un lamento, dolor o queja.En noches de nostalgia la guitarra puede sonar como el ronroneo del gato que haciéndose ovillo se calienta cerca del fogón. Un día dijo Don Ata acariciando a su guitarra:

Me gusta de vez en cuando perderme en el bordoneo, porque bordoneando veo que ni yo mesmo me mando. Las cuerdas van ordenando los rumbos del pensamiento. Y en el trotecito lento de una milonga va saliendo campo afuera lo mejor del sentimiento. Siempre en voz baja he cantao porque gritando no me hallo…

Justo es decir que hay coincidencias entre bordonear la guitarra y escribir.Cuando tomo lápiz y papel parece que alguien guía mi mano, mientras mente y corazón se acompasan y van brotando como agua de manantial. Bordoneando y escribiendo, yo no olvido que de palo es la guitarra y de palo se hizo el lápiz, palo que es bosque, tierra, sol, polvo de estrellas.

-Inspirado en Atahualpa Yupanqui. Bordoneando. Guitarra. Poemas y cantares argentinos. p,79
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Los tres gatos del samurai

Un guerrero samurai tuvo problemas con un ratoncito que decidió vivir en su habitación y comer la comida del samurai. Le aconsejaron al guerrero conseguir un gato impresionante, fuerte y hermoso. El ratoncito se burlaba del gran gato y sólo asomaba la nariz. El gato no pudo con él. El samurai trajo a un segundo gato astuto, fiero y desconfiado. El ratoncito sólo salía a comer cuando el sueño vencía al gato. El gato no pudo con él. Por último el guerrero samurai trajo a un gato de un templo budista de aspecto distraído, mediocre y con cara de soñoliento.Pasaron los días.El gato siempre con cara de soñoliento e indiferente dejó de inspirar precauciones al ratoncito que pasaba junto a él sin apenas hacerle caso. Un día, repentinamente, lo atrapó de un solo zarpazo.

Esta vieja historia budista me recuerda que entre los humanos hay tres actitudes ante la vida que llegan a tres diferentes resultados. La apariencia no es lo importante sino la actitud alerta, aún bajo capa de soñolienta indiferencia. Y por el lado del ratoncito, es un recordatorio para estar presente, plenamente, en cada instante.

- Inspirado en un viejo cuento budista





miércoles, 18 de octubre de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Un poquito de arena

Cuentan que el infatigable viajero invidente que fue Jorge Luis Borges llegó con María Kodama al desierto egipcio y ante el silencio y frente a las pirámides milenarias ,se inclinó tomo un poquito de arena en su manos, abrió la palma y dejó que el viento se llevara esos granitos .María Kodama le dijo coloquial y amorosa:

Usted me regaló un imperio de palabras,
modificó el desierto y
me reveló que la luna era mi espejo.

Me quedo con, Usted modificó el desierto. El más mínimo gesto y acto modifica al todo. Por eso cada paso, cada huella, cada palabra que sale de nuestros labios, cada encuentro y contacto nos cambia, y al cambiar el todo, la vida, el universo, son siempre nuevos y maravillosos. Esos gestos despiertan gratitud.

- Inspirado en J.L.Borges. Epílogo de Atlas. .Texto en la exposición fotográfica de María Kodama. Recoleta, Buenos Aires Octubre 3,2006.








Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera


Ser como flor del campo

La vida nos lleva a unos a viajar y viajar a otros les lleva a estar y a estar en su casa, en su rancho o en su pago.Cada viaje es un encuentro con seres queridos y otros nuevos y desconocidos que luego se convierten en cercanos y hasta familiares. Pero el secreto es la actitud con la que se viaja.Cuanto más abierto a descubrir, cuanto más abierto a tender puentes humanos, cuanto más ciudadano del mundo mejor, siempre mejor.Escribo en un avión que me lleva, yo no vuelo. Volar, sólo vuelan las aves. El avión es un tubo de aluminio que te transporta mas la sensación de extender las alas y respirar la frescura del aire es imaginaria en un aparato llamado avión.Esas horas largas o cortas en los estrechos aviones no son tierra baldía para mí. Volviendo al asunto de la actitud para viajar, mi viejo Don Ata me susurra al oído, desde el silencio, sus palabras sabias y yo escribo:

Soy como la flor del campo,
donde me tiran me planto,
en el monte o en las peñas…




- Inspirado en. Atahualpa Yupanqui. Bailecito. Flor del Campo. Cartas a Nenette Paris.Martes 25 Agosto 1962.p.91























Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Caballos ,barcos, aviones y pañuelos


Los pies del ser humano fueron su primer medio de transporte.Pasaron muchos muchos años y se valió de otros medios domesticando al caballo y al camello, al elefante y al avestruz sin olvidarnos del asno o burro.Entre todos estos seres vivos el caballo ha sido y sigue siendo el medio excelente.Díganlo las pampas argentinas o el desierto chihuahuense. Sin embargo, un día surgieron los medios masivos de transporte para humanos y sus cargas.Nacieron los barcos de todos los estilos y reinaron durante siglos y siglos.Pero hoy, el rey del planeta es el avión y parece que reinará largamente. Estoy contemplando el Puerto Madero en Buenos Aires. Es inevitable la presencia de Don que fue el cantor caminante por más de 50 años quien le dice a Nenette su mujer en una carta:

Nunca hice una canción sobre el mar...Están quietos y vacíos, los puertos y las costas.Ya no hay navíos, no hay adioses largos ni ocasos devorando trasatlánticos.Está muy triste la mar, porque está sola.Ya no suenan violines en sus noches tranquilas. ¡La urgencia, la urgencia, la velocidad! El avión es el rey, pero no tiene paisajes para mostrar.Las emociones quedaron en el mar, y los puertos no tienen los pañuelos del adiós. ¿Qué le pasa al mundo?


- Inspirado en. Atahualpa Yupanqui. Cartas a Nenette Paris.Martes 13 Agosto 1980.p.267






















domingo, 24 de septiembre de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Brisa me trae, brisa me lleva


Brisa, el extremo opuesto del vendaval.
Brisa, airecillo navegante que cruza el desierto tempranero en viaje de ida y por la noche en viaje de vuelta.
Brisa, vientecillo suave que nos toca y se lleva la pesadumbre que el andar y el tropezar nos dejan.
Brisa del desierto discreta, brisa urbana serpenteante, ululante que se cuela entre viejas ventanas y zaguanes y envuelve a los árboles para besarlos en el oído.
Brisa, sopla y mece el desierto y a una plazoleta recoleta, escondida, umbría, en Buenos Aires donde mi buen Jorge Luis Borges escribió:

La brisa trae corazonadas de campo,
dulzura de las quintas,
memorias de los álamos…



-Inspirado en J.L.Borges. Fervor de Buenos Aires / Caminata
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Manojito


Dice un cartel gigante de esos que están en lo alto de un edificio, en un edificio de esos que ocultan el andar del sol en la gran ciudad. Ud sin esta cámara Minolta no podrá vivir. Cosa bonita son las fotografías, no lo dude usted pero hay otras fotografías que son más lindas y preciosas que la tinta y el papel. Son las fotografías de la memoria agradecida, de la memoria amada y de la memoria amadora. Esas fotos no se vuelven amarillentas ni se hacen quebradizas, se vuelve parte del alma. Todos tenemos en un rincón del alma esas fotos. Mi buen Don Ata, dice en El Payador perseguido:


Mi tata era sabedor por lo mucho que ha rodao.

Y después que había cantao
destemplaba cuarta y prima,-cuerdas de su guitarra-
y le echaba un poncho encima
pa que no hable demasiado...

Volviendo y volviendo al desierto, después de un viajar y vagar por las llanuras argentinas, me queda un manojito de fotos en la memoria, de querencias que se quedarán junto a mi fogón y mi ventana.

-Inspirado por Atahualpa Yupanqui. El Payador perseguido.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Nada de eso sabemos

Tres muchachos pescadores tiburoneros se hicieron a la mar.En un abrir y cerrar de ojos estuvieron en una corriente marina.El combustible se agotó, se agotaron las probabilidades de dar media vuelta o salir de la corriente.Tuvieron de dos sopas o luchar contra la marea suicidamente o dejar que sus vidas fluyeran, confiando en ellos mismos, y en la sabiduría marina que los llevaría tarde,sí, un poco tarde, a buen puerto.Así pasaron 9 meses con sus noches.Vivieron de instante en instante. Fueron pacientes y sólo bebieron agua que el cielo les dio pese a estar en un mar de agua que no podían beber. Gaviotas y peces se acercaron y ofrecieron sus vidas para sostener las vidas de estos tres muchachos. No olvido que se llaman Luciano, Jesús y Salvador. Entrevistados, por los micrófonos anónimos, les preguntaron sobre su stress, su angustia existencial, su vivencia traumática. Estos muchachos se miraron unos a los otros hasta que uno de ellos, benévolamente, respondió ¿qué es todo esto que nos pregunta señorita? Nosotros nada de eso sabemos.Sólo pasábamos de momento en momento con la confianza de que a nuestro mar no se le teme pero se le respeta y, aunque tardara, su corriente nos llevaría a encontrarnos con alguien en el camino. Y así fue. Esas sesudas frases y conceptos se quedaron congelados en los micrófonos y en los gabinetes de los sesudos científicos.

martes, 19 de septiembre de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

El almendro

He dejado el desierto por un rato.Los vientos me han traído pasando por encima de las cordilleras y me he posado en la tierra argentina de la infinita llanura, del infinito verdor. La gran ciudad me recibe, pero aquí es invierno. Un cuarto piso. Un cuarto de hotel. Entre los altos edificios se cuela la mortecina claridad invernal del medio día. Una alegría me visita, la rama desnuda de un gran almendro besa el cristal de mi ventana.Alcanzo a distinguir una tímida yema, un tímido botón que guarda la certeza de una próxima primavera. Una vez más, la dureza del invierno austral marchará en retirada.La nueva vida se acerca, paso a paso. Algo despierta en mí. Me uno a ese andar, a ese júbilo creciente e interior que sabe que, no hay invierno tan poderoso que detener a la frágil y decidida primavera.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Como el sapo

Los humanos nos congratulamos por descender del homo humanus erectus, un ser evolucionado que tuvo dos privilegios.Primero, andar erguido, con la mirada hacia el horizonte, con los pies en la tierra y la capacidad de mirar al cielo estrellado y asombrarse. Segundo. El homo humanus erectus, además, se convirtió en el ser que camina, que hace senderos de ida y vuelta. La contraparte de este ser humano está formada por los seres que navegan en los aires y los que navegan en las aguas, así como otros mamíferos no humanos que poblaron la tierra. Entre todos estos seres vivos está el sapo. Del sapo se ha escrito abundantemente. Se destacan sus virtudes para controlar a las plagas que azotan a las plantas. También se señala que es bocón, que habla mucho y fuerte, sin olvidar que cuando se pone romántico canta en la orilla de la laguna y toca su guitarra.Es el sapo cancionero. Pero en estos tiempos también se dice, cuando algo está entrampado, y no avanza: estamos como los sapos que brincan y brincan pero caen en donde mismo, es decir, en el mismo lugar. O en otros términos, moverle a todo, para que nada cambie. Esta simulación de movimiento y cambio es una de las características de la vida política, hablando planetariamente.Pueba de ellos son los juegos de palabras que dicen, desdicen y contradicen, para que la realidad siga intacta.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

El pesado silencio

En mi refugio del desierto no hay teléfono ni Internet, la modernidad no ha llegado pero intuyo que pronto llegará. A pesar de ello mi viejo radio de onda corta -¡sí, todavía existen!- me pone en contacto, todas las noches, con el palpitar de nuestra nave planetaria en el lechoso mar de la galaxia.Me llegan las voces caribeñas, norteafricanas, sudamericanas, europeas y en todas ellas siento el ritmo del palpitar del mundo, pocas veces calmado. La mayor parte de las veces escucho en las noticias la angustiosa taquicardia, la acongojada respiración de los humanos desde los 4 rincones del mundo. En medio de esas noticias percibo una buena dosis de conformismo y hasta justificación de la situación social de millones de seres humanos.Por eso no ha pasado de moda y está vigente el decir de ese hombre -que pagó con su vida su atrevimiento al luchar por la no discriminación de sus compatriotas afro americanos en un país de blancos: Tendremos que arrepentirnos en esta generación, no tanto de las malas acciones de la gente perversa, sino del pasmoso silencio de la gente buena.

- Martín Luther King (1929-1968) pastor bautista afroamericano, luchardor por la no discriminación, la libertad del voto.Terminó asesinado.Recibió el Premio Nóbel de la Paz

viernes, 8 de septiembre de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Una puerta especial

Las obras humanas se conocen como obras de la cultura –cultivo- , es decir, fruto de las ciencias, técnicas y artes que aplicamos y cultivamos. Las demás obras son las de la Natura, las que se dan para nuestro asombro sin intervención nuestra como la lluvia los vientos, las mareas, el fuego, las migraciones de aves y ballenas, los ciclos estacionales y las sorpresas climáticas en los desiertos, cordilleras, selvas, bosques y lagos.
Las obras humanas están sujetas a la apreciación, valoración y juicio emitido por otros seres humanos. Sin embargo, las obras de la Natura son obras sin intencionalidad, son y nada más.Por eso las podemos apreciar con toda su frescura, belleza y transparencia. Un amanecer hoy es tan valioso como el primer amanecer del mundo.Un hombre sencillo que fue un gran botánico y especialista en árboles frutales, como el ciruelo y en tubérculos ,como la papa, dijo que

No hay otra puerta al conocimiento
Que la puerta que abre la naturaleza,
No hay otra verdad excepto
Las verdades que descubrimos
en la naturaleza.



- Inspirado en Luther Burbank (1849-1926) célebre botánico, de
Massachussets, por el ciruelo y la papa que que él desarrolló.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Una rama verde


La vida humana transcurre entre muchos afanes, deseos, anhelos, triunfos y derrotas.Cada cual sabe o, sabe a medias, cómo quiere vivir y para qué quiere vivir.En ese terreno no hay fórmulas ni matemáticas confiables.Lo que sí podemos ver en el talante de las personas es el aire que respiran en su interior y que de alguna manera se manifiesta en el exterior. Es hermoso ver a un anciano que no sólo conserva la lucidez de sus facultades sino también la chispa, el brillo en la mirada y el ánimo firme y generoso consigo y con los demás seres vivos.Este esbozo trazado con tantas palabras se resume, admirablemente, con un proverbio del budismo zen:

Si conservas verde una rama de tu corazón
un pájaro cantor llegará
y se posará en ella.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Frutos de la vida

En innumerables asuntos y problemas nos involucramos y complicamos la vida los humanos. Y así pasa el tiempo y nosotros a través de él. En medio de esos afanes se nos escapa algo importante, realmente y es descubrir que todos los animales, excepto el ser humano, saben que el principal negocio de la vida es disfrutarla. ¿O será que podemos aceptar que el principal negocio es venir a padecerla? Sin embargo no nos confundamos.No es sano buscar los sufrimientos por ellos mismos pero cuando representen nos fortalecerá el enfrentarlos directa y decididamente.



-Inspirado en Samuel Butler (1835-1902) Famoso escritor inglés, por su obra Erewhon, literatura de viaje y crítica a la sociedad victoriana neozelandesa.

domingo, 27 de agosto de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Contundente


¿Qué es lo interesante de hacer un viaje cruzando el desierto, navegando el océano, surcando lo vientos o alcanzando las altas cumbres? Para algunas personas lo importante es llegar, para otras ser el primero, no falta quien prefiera distinguirse por romper una marca de velocidad. Vuelvo la mirada y recuerdo a los dos primeros seres humanos que llegaron a la cumbre más alta -Everest o Chomolungma 28,029 pies- de nuestra nave en movimiento el planeta Tierra: Tenzing y Edmund Hillary. A ellos los acosaban, de día y de noche, con preguntas sobre numerosos aspectos de la ascensión y la conquista de la gran cumbre. Un día Hillary despejó las dudas y dijo: No es la montaña la que conquistamos sino a nosotros mismos. Ahí está la clave que distingue a los seres humanos. Unos escalan las montañas y nada más. Otros escalan las montañas y en el trayecto cumplen una gran tarea: conocerse un poco más así mismos.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Cielo

Cada cual imagina el cielo como quiere.Para algunos está más allá de esta tierra, en algún lugar en medio de nadal para otros el cielo es un estado de la conciencia y para muy pocos el cielo esta aquí, ahora y dentro de nosotros. El aquí de la vida es esta pequeña nave llamada la tierra que navega en la inmensidad del océano cósmico. Pues bien, hablando del cielo que está en nosotros, que está en esta tierra o pequeña nave, el gran Michelangelo Buonarroti dijo: Mi alma no puede encontrar una escalera al cielo a menos que sea a través de la amada Tierra.

- Michelangelo Buonarroti (1475-1564) Excelso pintor,escultor,arquitecto y poeta italiano del Renacimiento.





Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Hacer que suceda

Se trae agua desde grandes distancias en el desierto,
se mueven piedras inmensas y se levanta Macchu Pichuu,
se construyen ciudades, imperios,
se inventan mil y una cosas,
se curan mil y una enfermedades,
se viaja a través de mares, desiertos, rios, cañones,
se exploran los cielos y las profundidades el mar,
se cuidan ancianos y niños,
se trabaja en un bosque y
se salvan a los animales de un incendio pavoroso.

Millones de hombres y mujeres apuestan para la construcción de sociedades llamadas democráticas, donde no se apropie del poder un grupo, un clan, una tribu o un consejo de administración y menos un estado mayor militar, sino que el pueblo designe a sus genuinos representantes y la tarea de construcción se dé entre todos, todos los días.

Todas estas son algunas de las tareas humanas que llevan a millones a dedicar sus vidas en el esfuerzo de hacer que esta mundo avance y la vida tenga un sentido social.Ante este panorama podemos distinguir a tres grupos de seres humanos: hay gente que hace que las cosas sucedan, hay gente que mira cómo se hacen las cosas y hay gente que se maravilla por lo sucedido. Pero para que la vida tenga sentido, realmente, creo que necesitamos ser de las personas que hacen que las cosas sucedan.


-Inspirado en unas palabras del explorador James Lovell.

sábado, 19 de agosto de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Ir tan lejos...

Me voy de casa y me voy lejos, ya no los soporto. Esta frase la escuché hace años a un muchacho y a las pocas horas se marchó al norte, siempre al norte y se perdió en un rancho, allá en Nebraska. Pasaron los años y un día al salir de mi café mañanero, me lo encontré, como bajado del cielo, volteando la esquina. El muchacho se convirtió en un hombrón, como se dice por aquí. En el ínterin su padre falleció, no se vieron. Volví al café con él y después de escuchar con atención y emoción el relato de su viaje y la razón de su vuelta al desierto, me quedó no sólo el buen sabor del encuentro, del expreso corto y fuerte, sino una de las pocas certezas que me acompañan: El hombre viaja y cruza el mundo en búsqueda de lo que necesita y retorna a casa para encontrarlo.

-Inspirado en George Moore.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Levedad de un viaje

Hay dos tipos de personas antes de viajar. Los preocupones y los que lo son menos. Las preocupaciones son diversas, que si la bolsa, la maleta, los encargos, el dinero, las direcciones, los accesorios y un gran etcétera que se añade en el último minuto y también otro etcétera que se olvida. Pero hay algo bueno y probado que no falla y lo descubrí en uno de mis primeros viajes con la imaginación siendo aún niño: Quien quiera hacer una travesía feliz debe viajar ligero de equipaje. Con los años, los viajes y la experiencia me confirmé de los beneficios de un equipaje ligero.Pero eso no es todo.El equipaje de mi mente se ha aligerado.Viajar abierto ante las sopresas, imponderables, diferencias y hasta adversidades propias del viajar. Los temores, prejuicios y expectativas son el otro equipaje que pesa más que la maleta que nos acompaña.


-Antoine de Saint-Exupery (1900 - 1944) célebre escritor francés y piloto postal durante la segunda guerra mundial, autor de El Principito y navegante por el desierto de África

viernes, 18 de agosto de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Antes de partir


De vez en cuando y de cuando en vez me retiro unos días de mi querido desierto y voy a donde los vientos y la brújula me invitan. Y cuando los días se llegan de partir me lleno de una mezcla encontrada de sentimientos. Me llevaré al desierto conmigo y nuevas tierras me esperan con sus sorpresas, con descubrimientos e imponderables. Mi compañía de viaje es un pequeño texto que llevo desde hace muchos años en mi cuaderno de notas. Hoy me viene bien que esté sobre mi mesa de trabajo mientras preparo el equipaje y estoy agradecido para siempre con Alexander Solzhenitsyn cuando escribió estas líneas: Ten sólo lo que puedes llevar contigo. Aprende lenguas, descubre patrias, descubre a la gente.Permite que tu memoria sea tu bolsa de viaje.

- Alexander Solzhenitsyn (1918- ) célebre escritor ruso testigo de los excesos soviético-estalinistas durante el siglo XX.

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

La Cantora

La fuerza de las marcas de ciertos productos de la vida diaria hizo que llegaran para quedarse, cuando fui niño, allá en la década de los 50 del siglo pasado. Si estabas débil tenías que tomar el Aceite de hígado de bacalao de Noruega y la Emulsión de Scott.Te cepillabas los dientes con la pasta Kolynos y cuando aprendiste a afeitar el incipiente bigote lo hiciste con la Gillette. Lustrabas tus zapatos con la crema Nuggett y para laxar nada mejor que la leche de Magnesia de Philips y si tuviste dolor de cabeza echabas mano del mejor, mejora, Mejoral y si no la Cafiaspirina. Escribir fue arte con la pluma fuente Esterbrook y borrar con los Pelikan .Los dibujos se hacían con lápices Mongol y para escribir usabas los Mongol #2.Los zapatos fueron Diamante o Bata y los radios Telefunken, BlauPunkt, Nor Mende, Siemens, Zenit y el primer tocadiscos fue un Garrard. Los uniformes pre militares, cakis, fueron Buque y el chocolate por excelencia fue Ibérica y el de batalla, D´onofrio.La lista es infinita pero hoy ,en medio de estos recuerdos, brilla bajo el reflector de la memoria, la satisfacción dibujada en el rostro de mi madre cuando estrenó su nueva máquina de coser. Maquina de coser fue sinónimo de la Singer. Andando el tiempo y estudiando la lengua inglesa le decía yo a esa máquina, la Cantora, por lo de Singer. Fue un 12 de Agosto de 1851 cuando Isaac Merritt Singer patentó su célebre máquina de coser y formó la empresa I.M.Singer & Company para vender su producto. Hoy constato ,una vez más, la presencia de la memoria del corazón.

lunes, 14 de agosto de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

El camino de en medio


La inquietud nos lleva a decisiones alocadas. Lo alocado es el reflejo de una vida descontrolada. El descontrol personal y de los pueblos se muestra en el toque de los extremos y bandazos en los que fluye nuestra vida convulsionada -terror,pobreza,fanatismos- Alguien que conoció muy bien el alma humana con sus caprichos y autoengaños, pero que tuvo paciencia y compasión para no desesperarse con ella dijo: Los extremos son como engaños y emboscadas. Evítalos. Permanece en el camino de en medio. Pero tampoco te aferres al camino de en medio…

- Sidarta Gautama, conocido como El Despierto o Buda.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Incertidumbres y certidumbres

La incertidumbre tiene como contrapartida la tan anhelada certidumbre. Este tiempo es pobre en certidumbres y rico en incetidumbres.La incertidumbre recorre la vida desde el día en que se llega a este mundo hasta la hora de la partida. El futuro es sinónimo de incertidumbre. Las preguntas básicas sobre la vida y su para qué, están más llenas de incertidumbres que de certezas. La falta de información y de constatación, de algo, es la base de la incertidumbre. Pese a los avances de las ciencias y de la filosofía queda un gran terreno baldío donde florece la incertidumbre. Nuestro planeta guiado por humanos camina en medio de la incertidumbre. Las naciones no gozan de certidumbres con sus gobernantes y partidos que los conducen. La marcha de la economía y de las sociedades están colgadas de los vaivenes y hemos visto cambios positivos y también devastadores de tipo socio político en los últimos 100 años manifestados en guerras, migraciones, deportaciones, exilios, desempleo, marginación de los niños, mujeres y ancianos y degradación de la salud del planeta. La incertidumbre va de la mano de la responsabilidad y de la irresponsabilidad. Sigue vigente el decir de Schopenhauer: No hay ningún viento favorable para el que no sabe a qué punto se dirige. Esa incertidumbre básica es la que guía los pasos de la humanidad. Sin embargo esta meditación la hago a partir de un principio que ha guiado mi vida: Siempre que enseñes, enseña a dudar de lo que enseñes. (*) Estas líneas no tienen ninguna pretensión de convencer sino de mover y despertarnos.

- Arthur Schopenhauer filósofo alemán (1788-1860)
- José Ortega y Gasset ,filósofo español (1883-1955)

viernes, 11 de agosto de 2006

Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Combatientes

Tengo en mi refugio del desierto un pequeño libro sobre los escritores y las guerras. Me ha llegado del otro lado del mar. Hay 3 tipos de combatientes en las guerras.Los primeros van por obligación, son reclutados, no pueden resistirse y van al frente. Los segundos, son los mercenarios, los que venden sus servicios al mejor postor. Hacen su trabajo, cobran y se van. Los terceros, son una especie diferente formada por combatientes voluntarios, que fraternizan con una causa juzgada como noble y humanitaria, sabiendo que en ella se jugarán la vida. En esa terrible guerra civil fratricida que se libró en España, 1936-1939, hubo un voluntario irlandés, hijo único. Cayó bajo el fuego a los 25 años de edad y en su bolsillo se encontró una mínima libreta con sus escritos personales.La última página guardó 3 breves líneas que dijeron así:

En mi lejana Irlanda escribí poemas sobre la guerra terrible,
Hoy, mi poema será mi vida puesta y ofrecida en combate.
Es todo lo que tengo…

Así fue. A la libreta se le pegaron las hojas con su propia sangre.
Cartas del Desierto

Guillermo Pareja Herrera

Como el sapo

Los humanos nos congratulamos por descender del homo humanus erectus, un ser evolucionado que tuvo dos privilegios.Primero, andar erguido, con la mirada hacia el horizonte, con los pies en la tierra y la capacidad de mirar al cielo estrellado y asombrarse. Segundo. El homo humanus erectus, además, se convirtió en el ser que camina que hace que senderos y rutas de ida y vuelta. La contraparte de este ser humano está formada por los seres que navegan el los aires y los que navegan en las aguas así como otros mamíferos no humanos que poblaron la tierra. Entre todos estos seres vivos está el sapo. Del sapo se ha escrito abundantemente. Se destacan sus virtudes para controlar a las plagas que azotan a las plantas etc. También se señala que es bocón, que habla mucho y fuerte, sin olvidar que cuando se pone romántico canta en la orilla de la laguna y toca su guitarra.Es el sapo cancionero. Pero en estos tiempos también se dice, cuando algo está entrampado y no avanza, como es la justicia y la transparencia, que estamos como los sapos que brincan y brincan pero caen en donde mismo, es decir, en el mismo lugar. O en otros términos, moverle a todo, para que nada cambie. Esta simulación de movimiento y cambio es una de las características de la vida política hablando planetariamente.Pueba de ellos son los juegos de palabras que dicen, desdicen y contradicen, para que la realidad siga intacta.

Cartas del Desierto


Guillermo Pareja Herrera


En la arena, de cara al sol

Palestina, Beirut, Israel, Bagdad, y Afganistán, antes…
Siempre las mismas imágenes, ¿hasta cuándo? Desde hace 150 mil años no hemos dejado de de ser caníbales, homicidas y fratricidas. Primero fue la quijada de un burro en la mano de Caín, ahora es una bomba de racimo, ácido, fuego o láser. Pero el último instante de un soldado o de un civil derribado en la arena, el fango o el concreto es el mismo.
Mientras escribo algunos, siempre pocos, comentan sobre los daños colaterales. En sus mesas laterales los cubos de hielo, en pesados vasos de cristal cortado, refrescan el whisky. Los sillones de piel, las gruesas alfombras, los dobles cristales evitan que las voces agonizantes, el humo, el polvo, lleguen a su altura celestial. Escribo en congoja y en vergüenza.

El trazo de la lluvia de fuego y metal me llena los oídos
Me seca la garganta de angustia
Me llena los ojos de polvo
Pronto desciende el manto del silencio
Más polvo

Escucho unas voces
que dicen:
Está muerto,
Mira, le salen borbotones de sangre
por la boca y los oídos

Yo, escucho
Yo, veo
lo que ellos escuchan y ven.

Una mosca -la reina de las guerras-
que esperó, pacientemente,
se posa en mi ojo derecho,
se pasea victoriosa,
sé que ella se comerá
mi mirada.