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viernes, 30 de mayo de 2014

Fluyendo





GPH
En nuestro querido desierto el agua es un tesoro y las razones sobran. La meditación sobre el agua, sus características, dones y utilidades es infinita. Todos nosotros estamos hechos de gua y nuestra mente es sutil y fluida como el agua. En el arte de vivir hay ritmos y uno puede ir rápido o lento lo importante es saber discernir cuando toca una cosa y cuándo la otra. Respecto a las variadas dificultades que encontramos y encontraremos en la vida vele la pena recordar los dichos de nuestros viejos rancheros: El agua fluye, las piedras permanecen.

miércoles, 7 de mayo de 2014

Fugaz y estable

GPH
La inmensidad de nuestro desierto y su horizontalidad nos permite observar el ciclo anual de las transformaciones y cambios. Esa sabiduría de observaciones milenarias se detiene en la contemplación de lo fugaz y lo estable. Nuestros viejos han acuñado aquello de:   La barca pasa, la orilla queda. Lo sabio está  en discernir y elegir  que unas veces somos barca y otras  veces seremos orilla. 

domingo, 4 de mayo de 2014

Tener

GPH
Es patente que en nuestras vidas pasamos de pensar en quién soy al qué hago y al qué tengo. Una referencia clara a los tres verbos básicos de la vida:ser, hacer y tener.  Sobre esos tres reinos se ha escrito de manera incalculable. Hoy me detengo en el asunto de tener, qué tener, cuánto tener, cómo tener. Requerimos de discernimiento para saber qué tener, moderación para decidir cuánto tener, y una conducta recta sobre cómo alcanzar lo que tenemos  -tema de la relación entre los medios y el fin-  El tener es causa de satisfacciones, alegrías y también preocupaciones, ansiedad y conflictos  que pueden llevar hasta perder la vida o matar a otros por tener. Pero suele suceder que, de vez en cuando, volvemos a un punto cero, pues perdemos en segundos todo lo que tenemos, llámese incendio, inundación, terremoto o naufragio. Son situaciones en el límite y entonces se abre una luz para nosotros que los viejos rancheros de nuestro desierto conocen desde siglos atrás: Un hombre sólo tiene lo que no puede perder en un naufragio. ¿Qué no puede quitarme un naufragio? Me quedo con esta pregunta , agradecido a la vida y a mis amigos de estas tierras.

viernes, 10 de junio de 2011

Puentes



Nuestra vida es una sucesión de experiencias que pueden dejarnos lecciones para la  vida que aún nos quede, de ahí que nunca, nunca es tarde para aprender. Entre tantas lecciones que nos esperan está una que me maravilla considerar. Proviene de mi pasión por conocer los puentes, observar los puentes saber de su historia, entender cómo se construyeron, indagar en sus peculiaridades históricas y asombrarme ante el puente como uno de los primeros inventos humanos en el campo de la construcción. Un puente es una forma práctica e inteligente -a veces bella-  para ir de una orilla a otra  -sorteando aguas y abismos y acortando los esfuerzos humanos. Podría pasar la noche escribiendo sobre esta delicia humana, tan codiciada en tiempo de guerra, donde es lo primero que destruye el enemigo para aislar a su oponente y cortarle la retirada. Hay otros puentes hermosos en nuestra imaginación como esos de plata que construye el amor, los invisibles, que nos llevan hasta el ser querido y los que sin dificultad alguna van y vuelven de la Luna. Bien, pues un general les dijo a sus soldados en la arenga final antes del combate:   Lo más difícil de aprender en la vida es qué puente hay que cruzar y qué puente hay que quemar. Terrible decisión a veces y la historia da cuenta de esos dilemas. Tanto trabajo llevar construir y en un instante puede convertirse en un montón de piedra humo y sangre.