Hay animales que despiertan una particular relación con los humanos. ¿Pero que decir de
los animales fantásticos como el dragón? Dragón una criatura
de nuestra mente aunque no lo tenga cautivo ningún zoológico terrestre: Pese a ello, el dragón
se pasea por el mundo . Un dragón , mitad serpiente, mitad ave, que nos asombra. Pero el dragón que todos tenemos en la realidad de nuestra
imaginación es dragón porque escupe llamaradas
de fuego. Desde los tiempos en la oscuridad de la historia humana unos le
han temido y otros se han inspirado en el dragón para ser fuertes, resistentes
ante la adversidad. El escupir fuego es la muestra de la potencia física y
psíquica de ese admirable ser: el dragón. El fuego es la muestra viva de la
transmutación de todo lo que le
alimenta y se convierte en el corazón de la vida. La simbología y
mitología antigua y medieval fue rica en la simpatía por el dragón y mañana los niños -de toda edad- seguiremos maravillados el vuelo nocturno del dragón.
Es una antología de las Cartas del Desierto que trasmito en Radio Universidad 105.3 FM y 1310AM, Chihuahua. Mexico. Una mirada sobre el mundo, la vida y la historia Social desde el desierto Chihuahuense en el Norte de México. Escribo y comparto mis sentires mientras vamos de camino: Si estas Cartas te ayudan y las reproduces, cita al autor y a la fuente. ¡Gracias por escribir tus comentarios¡ -La vida abre la puerta,nosotros hacemos el camino-
sábado, 13 de junio de 2015
viernes, 12 de junio de 2015
La escoba
Nuestras vidas están rodeadas y envueltas por el cálido manto
de los inventos sencillos básicos, indispensables. Observemos la simplicidad de
la rueda, de un tenedor, una cuchara, un
plato hondo, un vaso …y una escoba. La escoba
que sólo ha transformado mínimamente sus
materiales originales pues su función real y metafórica sigue imperturbable. La
escoba en la cocina familiar, la escoba en la peluquería y levantando la viruta
en la carpintería. Escena indeleble de mi niñez, cada mañana la ancianita barriendo la vereda de su casa haciendo coro con la fuente de agua, los
jilgueros, las palomas, los gorriones.Un anciano carpintero budista le recomendó
a un principiante: cuando no sepas qué hacer, cuando te sientas aburrido…toma
la escoba y “ponte a barrer”, sí barrer de nuestra mente los pensamientos
ociosos, improductivos y alimentar aquellos que nos disponen para vivir ligeros,
con pocos apegos, con pocos sentimientos adversos.Barrer nuestra indolencia, enojos
y las palabras inútiles. Triste la casa, triste la vida que no tiene una
escobita detrás de la puerta…
jueves, 11 de junio de 2015
Los trabajos del alma
miércoles, 10 de junio de 2015
La duda
![]() |
Chinese writer |
martes, 9 de junio de 2015
Colores de nuestra casa
En los momentos y días de alegría
como en los de tristeza, pérdida y depresión es de gran ayuda recordar nuestro espacio
y nuestro tiempo en el
cosmos y en nuestro pequeño planeta azul. La historia que nos
precede comenzó hace 13,700 millones de años con la gran explosión -Big Bang-
que se parece a una gran roca que explotó y se convirtió en millones y
millones de partículas que por la fuerza misma fueron proyectadas al espacio y
comenzaron un proceso de expansión y de evolución dentro de un mar de fuerzas, energías e
interacciones químicas como gases y líquidos. En el caso particular de la formación de nuestra amada Tierra la historia es más reciente ,unos
4, 500 millones de años. Las llamadas rocas son curiosamente seres que
evolucionan y se transforman por la acción de las condiciones ambientales. La
tierra ha tenido su etapa negra de
basalto , su etapa azul de los
océanos en formación, su etapa gris de granito,
su etapa roja de la fotosíntesis y oxidación , su etapa verde de la biósfera -aparición de plantas, animales y humanos
pensantes que aparecimos hace unos 150 mil años, es decir, hace un pestañeo en
el tiempo- la etapa blanca o ciclo de nieve e invernadero. De ahora en adelante este
proceso no se detendrá hasta que nuestro sol se apague -entropía-
y ese día o final del gran juego será dentro de unos 5 mil millones de
años. De tal manera que, más que decir
“salvemos al planeta” hay que decir y hacer un salvemos la vida humana y las formas de vida de las consecuencias que
nuestras acciones depredadoras están causando. Dicho en términos más
sencillos: el enemigo no está fuera de nuestro pequeño planeta ni habita en un
punto lejano de nuestro sistema solar y galaxia. El enemigo está en nuestra
casa y somos nosotros mismos con nuestro atolondrado e irresponsable estilo de
vida ¿Estaremos a tiempo? Ruego para que no le demos la vuelta a este punto. El planeta seguirá con y sin nosotros en los
próximos miles de millones de años y otras formas de vida también, pero nuestra
familia humana puede desaparecer más
rápido de lo que imaginamos.[1]
lunes, 8 de junio de 2015
Bibliotecas naturales
![]() |
Alpamayo, Los Andes.Peru |
Suscribirse a:
Entradas (Atom)