Cada generación de jóvenes recibe su sociológica etiqueta para
distinguirla de la anterior. En pleno siglo 21 tenemos a los jóvenes ni-ni
-que ni trabajan ni estudian- atrapados en callejones que se antojan sin
salida fácil. En España los jóvenes se
prepararon para ingresar por la puerta grande en la Europa de la abundancia y
daban por hecho que el sueño de las maestrías y doctorados, el departamento
propio, el carro del año, la vacación de verano, la familia y el ahorro se les
darían como por arte de magia. Pero ¡oh desilusión! ellos son la generación burbuja -en la que fueron concebidos, amamantados,
educados y mimados hasta que estalló con
el fino punzón de la realidad venida a
menos. Deudas impagables, tasas de interés por las nubes, desempleo y evaporación del estado protector les
recibieron con fanfarria. Burbujas allá y burbujas aquí en nuestra patria
mexicana. Estamos llamados por la vida a despertar
de nuestra burbuja para encarar a la realidad de saber que nada se tiene
por seguro y que lo único seguro es que depende de nosotros elegir la mejor actitud -según nuestra conciencia- ante las
cambiantes situaciones de la vida, tanto en el plano individual como en el plano
comunitario o nación. Pero hay algo más ,la realidad no sólo hay que explicarla
sino transformarla -a partir de
transformarnos nosotros-
Es una antología de las Cartas del Desierto que trasmito en Radio Universidad 105.3 FM y 1310AM, Chihuahua. Mexico. Una mirada sobre el mundo, la vida y la historia Social desde el desierto Chihuahuense en el Norte de México. Escribo y comparto mis sentires mientras vamos de camino: Si estas Cartas te ayudan y las reproduces, cita al autor y a la fuente. ¡Gracias por escribir tus comentarios¡ -La vida abre la puerta,nosotros hacemos el camino-
Mostrando entradas con la etiqueta Dinero. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Dinero. Mostrar todas las entradas
martes, 28 de octubre de 2014
domingo, 18 de mayo de 2014
Volver a la rama
martes, 29 de octubre de 2013
Un tratado diferente
La humanidad lleva más de veinte años
abocada a los llamados procesos de
integración económica a través de los tratados de libre comercio entre naciones y conjuntos de
naciones -de los llamados primer,
segundo y tercer mundo o países desarrollados y en vías de desarrollo. Me queda
muy claro que el énfasis se ha puesto en la globalización de la producción de
bienes, en la globalización de los mercados, en la globalización de los
capitales que buscan invertir donde más ganancias puedan alcanzar en las
mejores condiciones. Las democracias están condicionadas por el poder económico
de unas quinientas empresas mundiales y
su capacidad de presión doblega a los representantes y gobernantes de naciones
grandes, medianas y pequeñas. Lo último es que ha quedado al descubierto la
inmensa telaraña de la maquinaria de espionaje norteamericano que partiendo de
la tesis de combate al terrorismo, desde el Septiembre 11 de 2001 extiende sus
tareas al campo industrial y de las materias primas -sin dejar de escuchar las
mismísimas conversaciones de los principales gobernantes del planeta. Pareciera
que todo se reduce en este mundo a poder y dinero y a más poder y más dinero
concentrado en pocas naciones y en pocas manos visibles e invisibles. Hoy me pregunto 4 cosas: ¿No ha llegado ya la
hora de pensar seriamente en que el mundo y la vida no es sólo un gran mercado
para comprar, vender y especular, ni sólo un conjunto de tratados de libre comercio? ¿No es hora de trabajar en la
globalización de los seres humanos, es decir, no debemos alcanzar una integración
humana? ¿No es el tiempo para
que los seres humanos podamos
caminar, navegar y volar libremente por el planeta entero compartiendo nuestro
saber, nuestras habilidades y bondades y que no tengamos ciudadanos de primera
,segunda, tercera y sin nombre? ¿No ha sonado la hora de crear tratados de integración humana en grandes familias humanas
como la latinoamericana mestiza, afro e indígena y así en cada continente? Los
humanos vivimos obsesionados con los mercados económicos y hemos dejado fuera al invitado
principal que da sentido a tanto trabajo: el ser humano. Cuando se
escriba la historia de nuestro planeta no será grato hablar del siglo 20 como
el más mortífero y del siglo 21 como el siglo de unos pocos que arrasaron con
todo. Estamos ante la oportunidad de aprender de lo vivido con errores y darnos una oportunidad para el salto
cualitativo de humanización.
sábado, 23 de febrero de 2013
Lo que se puede y no se puede comprar
Hay frases y formulaciones que pasan de padres a hijos
como aquella que me trasmitió mi abuelo un día: No gastes tu precioso tiempo en pensar todo lo que puedes comprar con
dinero. Gasta tu precioso tiempo en hacer una lista de todo aquello que ni con
todo el dinero del mundo podrás comprar… e investiga sobre ello. Desde entonces, el dinero en mis manos se ha movido... lentamente.
sábado, 2 de febrero de 2013
Los dineros y los motivos
El para qué y el por qué hacemos lo que
hacemos y somos lo que somos es un reino que suscita preguntas que siempre han
interesado al ser humano. Hoy solemos englobar esas preguntas bajo el nombre de
las Motivaciones humanas, es decir,
lo que nos mueve a ser y al hacer. Junto con este tema está otro
tema muy viejo y gastado en la historia humana y es el dinero ,su papel y sus poderes reales e imaginarios. El dinero ,como
instrumento, está en las manos humanas y con él podemos hacer y terminar por ser
como imaginamos. Voltaire, esa mente aguda de la revolución francesa captó lúcidamente
un aspecto y dejó para nosotros esta frase: Quienes creen que el dinero lo hace todo, terminan
haciendo todo por dinero. [1]
jueves, 13 de diciembre de 2012
La noticia que no llega
Desde el despertar a esta vida escuché en el hogar de mis padres que el pan de cada día se cosechaba después del trabajo de sembrar la tierra cuidarla y trillar los campos. Pasaron los años y un día me di cuenta que muchos seres humanos queremos el camino corto para llegar a tener abundancia material ,es decir, dinero en la bolsa. Ahí esta ,ante nuestros ojos la galería de los juegos de la lotería, los boletos de tómbolas y las infinitas apuestas a los cavilosa los partidos deportivos y todos los juegos de azar. Además gastamos en preguntarles a los adivinos y a los videntes, a los lectores y lectoras de las cartas sean egipcias, españolas o el tarot. La misma pregunta:¿me llegará dinero del cielo? Las respuestas siempre son alentadoras para los clientes ,para que la esperanza no se apague y el negocio continúe. Pero una muchachita de gruesos lentes y trenzas le preguntó a su profesor enfrente de todos sus compañeros:¿Por qué nunca vemos esta noticia en un periódico: "Adivino gana la lotería"?. La respuesta fue un silencio y una sonrisa.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)