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viernes, 19 de agosto de 2016

De la necesidad al juego y el juego como necesidad.

Desde el clarear de los tiempos los humanos movimos lanzábamos piedras  para  juntarlas  y construir un muro, un refugio. Afilábamos carrizos y ramas convertidas en  lanzas para cazar animales y tener alimento.   Aprendimos a meternos en las aguas y nadar. Tuvimos que caminar, trotar, correr, saltar obstáculos en llanos, cuestas y bajadas. Todos estos movimientos se hicieron por necesidad pero llega el día en que comenzaron a practicarse por gusto, gozo y alegría y nacieron los juegos olímpicos en la antigua Grecia. De entonces al día de hoy se han transformado y se han convertido en un fin en si mismo. Se ha acentuado la competencia en nombre de la propia bandera, y las recompensas económicas y no sólo la búsqueda de superación individual y grupal. De la necesidad se pasó al juego y hoy el juego es una necesidad de las sociedades industriales, sedentarias.  Más importante es que a largo plazo descubramos que el ejercicio, el deporte, es una escuela de vida sana, de mejoramiento social, comunitario. Más aún que lleguemos al ocaso de nuestras vidas en las mejores condiciones con disciplina y un habito firme de tener en el centro de nuestra vida diaria la práctica del ejercicio para mantenernos fuertes y mentalmente serenos y entusiastas.

martes, 29 de marzo de 2016

Tiempo y tiempo de fango

Como el día precede a la noche , en el cambiante ciclo diario así tenemos que en la vida política se suceden dos tiempos:ganar y perder elecciones. El que gana no gana para siempre, el que pierde no pierde para siempre. El que gana sabe -o se espera que sepa- que sus días están contados y que saldrá por la puerta que entra. Pero mientras sucede... esta el "tiempo del fango"  al decir de mi querido U. Eco. Tiempo de elecciones es tiempo de fango.Tiempo de acusaciones mutuas, de insinuaciones, de secretos que piden ser revelados y que aunque estén  vacíos asustan, siembran la sospecha y des legitiman al adversario. No hace falta echar una cubeta de fango  sino una simple salpicadura  y queda instalada la desconfianza. 'Parece que le gusta los restaurantes exclusivos  y  la compañía de una elegante señora que no es su mujer' . Con asomar insinuaciones sobre la conducta del individuo en temas sensibles como el sexo, las creencias, y el dinero se tiene el terreno fértil y en bajada. ¿Y por qué tiempo de fango? Porque el fango no es tierra sólida confiable  ni es agua clara que corre... Miremos al vecino del  norte, fango, miremos a la propia casa, fango.Tiempo de elecciones.Pasado el tiempo del fango parece que todo sigue como si nada. Tiempo del fango, casi un divertimento, pan y circo. ¿Qué  decimos, qué hacemos  los ciudadanos?

miércoles, 21 de octubre de 2015

Primeros y últimos en el desierto



En el avión manda un capitan así como en el barco y un coronel en su cuartel y el profesor en su aula. Hasta aquí es sencillo comprender que los espacios de la convivencia humana tienen una jerarquía explícita. La comprensión de esta característica, nuestra gentre del desierto la ha comprendido desde hace siglos y asi decimos de boca en boca:  “Tú príncipe y yo príncipe, pues, ¿quién conduce el burro?"


sábado, 16 de mayo de 2015

Soy...



Gutemberg times
El tema de la identidad nos lleva a responder a la pregunta, ¿quién eres?  ¿a qué te dedicas?  Las respuestas pueden ser: soy un hombre de negocios, soy un hombre de política, de artes, de ciencias o soy un hombre de letras. He conocido algunos hombres de letras y las minúsculas y pacíficas letras de imprenta ,sin disparar una sola bala, construyen o derriban imperios, famas, costumbres. La responsabilidad social e histórica de lo que escribimos nos lleva a ir más allá de la preciosura de las palabras y las frases para transformar la realidad deshumanizada en algo que nos acerque  a nuestra íntima aspiración: un mundo cimentado en acciones justas, en acciones pacíficas. Cada cual pone al servicio de la patria humana sus mejores habilidades. El hombre y mujer de letras no ponemos al servicio una espada sino las "letras de molde"


martes, 28 de octubre de 2014

Burbujas



Cada generación de jóvenes  recibe su sociológica etiqueta para distinguirla de la anterior. En pleno siglo 21 tenemos a los jóvenes ni-ni   -que ni trabajan ni estudian- atrapados en callejones que se antojan sin salida fácil.  En España los jóvenes se prepararon para ingresar por la puerta grande en la Europa de la abundancia y daban por hecho que el sueño de las maestrías y doctorados, el departamento propio, el carro del año, la vacación de verano, la familia y el ahorro se les darían como por arte de magia. Pero ¡oh desilusión! ellos son  la generación  burbuja  -en la que fueron concebidos, amamantados, educados y mimados hasta que  estalló con el  fino punzón de la realidad venida a menos. Deudas impagables, tasas de interés por las nubes, desempleo  y evaporación del estado protector les recibieron con fanfarria. Burbujas allá y burbujas aquí en nuestra patria mexicana. Estamos llamados por la vida a despertar de nuestra burbuja para encarar a la realidad de saber que nada se tiene por seguro y que lo único seguro es que depende de nosotros elegir la mejor actitud  -según nuestra conciencia- ante las cambiantes situaciones de la vida, tanto  en el plano individual como en el plano comunitario o nación. Pero hay algo más ,la realidad no sólo hay que explicarla sino transformarla  -a partir de transformarnos nosotros-

domingo, 14 de septiembre de 2014

Pérdidas y olvidos




Un invento de la sociedad moderna es contar con una “oficina para los objetos perdidos y hallados”.  e sus﷽﷽﷽na piedrecilla .Estirouspiro que le dur su mano por debajo de la toalla y encontr una ola grande borro ¿Qué hemos perdido en la vida, nos preguntó Don Miguel? Veamos qué respuestas de nuestro heterogéneo grupo: Perdí los dientes en una pelea.Pedrí mi primer sueldo, me lo robaron. Perdí la estrella que me guía en la noche. Perdí mi casa. Perdí mis ahorros de 14 años. Perdí de vista el puerto. Perdí mi rancho, mi isla segura. Perdí la salud en las cantinas. Perdí la confianza en sus palabras.  ¿A dónde se fue lo perdido?  Como suele suceder casi todo termina en otras manos que ni plantaron ni cuidaron pero cosecharon gratis. Como suele suceder llegó el viento y me lo llevó de las manos y sabe dónde habrá terminado todo lo perdido. Me sorprendo al pensar que a,didas y olvidos.a.hasta de lo perdido me olvido y con trabajos me acuerdo que hoy se me secharon gratis.ún recuerde algo de lo perdido pues ,con los años, hasta de lo perdido me olvido y con trabajos me acuerdo que hoy se me olvidaron las llaves en casa.






domingo, 10 de agosto de 2014

Murales




Víctor Cauduro. GPH

Víctor Cauduro -detalle. GPH
La necesidad de expresar los contenidos urgentes del alma humana se ha satisfecho pintando murales. Los primeros murales se plasmaron en  las paredes de las cuevas y cavernas desde la aurora de la humanidad. Es el llamado arte o pintura rupestre. Pasando el tiempo los murales aparecieron el las paredes, y muros interiores como exteriores, en las cúpulas y torres, en los campanarios  así como en todo tipo de recinto cívico, militar o político. Los murales son didácticos, entretenedores, confortadores, denunciantes y ,para algunos, son  irreverentes, incendiarios. En nuestro amado México es bien sabido que 1930 es el inicio del movimiento muralista  -que se extendió por los cuatro puntos cardinales en nuestra patria y como semilla al boleo germinó en toda América latina. El denominador común de ese muralismo fue la denuncia social y política de la deshumanización de la vida  -por el ejercicio del poder económico y político de manera dictatorial. Las representaciones plasmadas en los murales son inevitables pues sus dimensiones, la fuerza de sus temas, el poder de sus colores y la energía de los rasgos humanos son subyugantes. Los murales son el gran texto de la historia real   convertido en color y formas.  Todo lo dicho queda resumido en la  hermosa y potente expresión  de  nuestro artista Víctor Cauduro en la Casa de la Corregidora de Querétaro. 


  

lunes, 2 de diciembre de 2013

Apreciar,valorar




Estar en el mundo es una experiencia donde todas las cosas que nos rodean son mediaciones cuyo sentido último es ayudarnos, auxiliarnos, facilitarnos nuestra tarea de vivir buenamente. Las cosas son puentes que nos llevan a la otra orilla de nuestras realizaciones. Como puentes, son medios y no fines en sí mismas. La relación de los seres humanos con las cosas ha cambiado mucho a lo largo de los siglos. Hemos llegado  al punto donde nos  llamamos la sociedad del consumo -donde vivimos para consumir cosas y hacer de ellas el fin y el sentido de la vida. Este trastoque es de tal magnitud que, las consecuencias son contrarias a lo que uno  se podría imaginar. En lugar de la tan soñada felicidad se tienen cuadros de multitudes humanas ansiosas e infelices. La medicina para este padecer es sencilla y eficaz si la comprendemos con el corazón y desde el fondo de nuestro ser. Se resume, como dijo un amigo tuitero considerando que : Las personas más felices no tienen las mejores cosas, simplemente aprecian y valoran las cosas que tienen.