Mostrando entradas con la etiqueta Creencias. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Creencias. Mostrar todas las entradas

sábado, 18 de junio de 2016

La realidad

Es natural que los seres humanos creamos que vemos la realidad "como ella es "
Esta creencia no ha soportado el cuestionamiento y la demostración  científica.
Un hombre bueno y sencillo después de tener un intercambio de ideas y de palabras  con otra persona  le dijo algo que ,pasado el tiempo,  es de gran ayuda:  
'...usted y yo no vemos las cosas como son. Vemos las cosas como somos' 

Una pregunta inevitable y alentadora es:

¿Y cómo soy?

- inspirado por H.W. Beecher

lunes, 16 de mayo de 2016

Creer

El mundo de nuestras  ideas , de nuestros pensamientos es un amplísimo reino en el que nos movemos libremente. 
Pero en el reino de las creencias tenemos otro panorama pues "creer"  es aceptar algo sin tener evidencias contundentes. 
Nuestra amiga Almudena Grandes opinó agudamente: "...el  verbo creer es un verbo especial, el más ancho y el más estrecho de todos los verbos.” 

miércoles, 6 de mayo de 2015

Allá, en Carolina del Norte



Un salón de clases en una primaria del sur de Estados Unidos. 
"Niños, dibujen a nuestros padres Adan y Eva" -indicó la profesora.
Todos los niños  -menos uno- dibujaron un Adan y una Eva …blancos
Tom, los dibujó negros.
A partir de ese día, los niños aprendieron a dudar de las llamadas “verdades" que a nadie le consta. 

domingo, 14 de diciembre de 2014

5500 kilómetros a Tombuctú




Un enamorado de los desiertos del mundo,Patrick Profit [1]realizó un viaje a través del Sahara de 5500 kilómetros desde la costa de África occidental, en Saint-Louis, Senegal  teniendo como destino final la célebre y mítica Tombuctú, santuario de la sabiduría islámica, centro de comercio, cruce de caminos en medio del mar de arena, en el silencio eterno. Cruzó incontables aldeas y bordeó largamente el río Níger en sus partes lentas y brillantes como espejos bajo el sol. Profit fue tras las huellas de René Caillié quien fue el primer occidental  del siglo XIX en traer noticias y documentación sobre la mítica ciudad del desierto sahariano.  Profit tuvo la ayuda de los nómadas Tuaregs  -ahora más sedentarios por causa de la mundialización y los vehículos de motor que hacen a un lado a las silenciosas caravanas de camellos y dromedarios en las rutas de la sal. De sus notas me llama poderosamente la atención los miedos observados en los pescadores en el río Níger que nacen, viven y mueren en su amado río pero tienen pavor de internarse en las arenas del Sahara y por lo contrario los nómadas de las caravanas que temen al río ,no saben nadar y no se meten en él por el temor al agua. Llegada a la última etapa de 900 kilómetros sin una alma humana llegó a Tombuctú. El misterio que la envuelve no está en sus casas y mezquita de adobe cocido al sol, sino en el silencio que quiere comunicar sabiduría sin palabras  -como lo hace un sordomudo que nos habla desde su silencio. Tombuctú tuvo una universidad islámica 200 años antes de que se fundara la Sorbona de París. Tombuctú albergó a 25 mil estudiantes e irradió cultura, ciencia, filosofía y sabiduría en el mundo del desierto. Profit al igual que René Caillié quien le despertó su amor por la geografía y los viajes anotó: “En esa inmensidad de arena  vi   cómo las tempestades se engullían a las caravanas  y divisé un minúsculo punto en el horizonte: Tombuctú”. Gracias a René Caillié, gracias a Patrick Profit, los desiertos del mundo nos esperan como maestros de vida  -para aquellos que tienen dos ojos para contemplar, dos oídos para escuchar pero sólo una boca para que de ella  salga la palabra sabia en el momento oportuno.








[1] Patrick Profit. Transsaharianne. Documental francés realizado en 2009.Duración 52min 30sec.

martes, 11 de enero de 2011

El viaje del Guajolote

En tiempo de los aztecas el llamado Guajolote, preciada ave para alimentarse, fue celebrada cada 200 días, como si fuera su cumpleaños. Llegados los españoles a estas tierras tomaron nota y llevaron el primer Guajolote mexicano a España donde se le llamó Pavo. Las cortes españolas estaban hartas de comer cerdo, faisán, gallina, pato y ganso. El señor Pavo los desplazó firme y sistemáticamente. Su viaje continuó y llegó a Francia con similar éxito y fue llamado Dindon. Luego de pasearse victorioso por las casas reales europeas el Guajolote aterrizó en Inglaterra y le asignaron el nombre de Turkey –los ingleses llamaban a todo lo exótico, a todo lo no inglés con el apelativo de Turco o Turkey en alusión directa al pueblo del Asia menor- Pasaron muchos años y un día un grupo de creyentes incómodos con la intolerancia religiosa en Inglaterra embarcaron rumbo a América y se establecieron en las llamadas 13 colonias cuna de los Estados Unidos. Para dar Gracias por el viaje, la libertad religiosa y la vida sirvieron una gran cena presidida por el Turkey o hermoso Guajolote. Largo viaje alrededor del mundo para volver a nuestro continente de donde salió. Hoy el Guajolote o Pavo recorre toda América en los días de la Navidad.

[1] Otros nombres:Pípilo,Cócono,Totole,Chumpipe