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lunes, 3 de octubre de 2016

Esta lluvia, esta tarde

Dicen que todo con moderación se disfruta más

En un extremo la sequía

y su contraria, la inundación.


Mientras en esto pienso

vienen a mi tres lineas
con las bondades de la lluvia 


"Esta lluvia que ciega los cristales 

Alegrará en perdidos arrabales 
Las negras uvas de una parra en cierto"



Esta lluvia que ciega los cristales... 



-inspirado por JLB , Lluvia

viernes, 13 de noviembre de 2015

Visto en el desierto




Atacama, Mario Ruiz  -Corbis
¿Cuándo has visto a hipopótamo volar? Una frase de mi infancia para señalar lo imposible. Me arrancaba una sonrisa inevitable. Pasaron los años y escuché otra  frase aparentemente imposible:  ¡Sí, cuando el desietrto florezca! Un reto, un imposible.  Pueden pasar 20, 40,70 años de sequía  y los cielos se abren  súbitamente y dejan una huella en la memoria de generaciones. El desierto ha florecido. Un gozo, una alegría  indescriptible que nos hermana sin importar que la noticia nos llegue de cualquier desierto hermano de nuestro planeta como el sonorense, chihuahuense, peruano y chileno, los desiertos africanos, asiáticos, del medio oriente  y australiano. ¡Sí, cuando el desierto florezca!


viernes, 30 de enero de 2015

Tardes de verano




Las tardes del verano nos regalaban aguaceros con tremendas gotas salpicantes y marchantes dentro del caudal y la pendiente de la calle, un ejército de soldaditos. Allá, en el alto cielo los truenos fueron  un temido ejército galopante. Un cielo poblado por ovejas grandes, medianas y pequeñitas  que tan pronto llegaban,desaparecían en el matadero del horizonte. Las tardes del verano, un libro abierto sobre el breve tiempo,  la breve vida  –con ese agridulce inconfundible.

sábado, 22 de junio de 2013

El viento, el agua






Cada 100 años los arroyos en nuestro desierto rebosan  en los meses de lluvia. Mientras tanto las piedras grandes y pequeñas y los arbustos que crecen en los lechos saben que un día el agua llegará, porque el agua no olvida, el agua tiene memoria. Y lo mejor ,como humanos, es no fincar donde las agua han hecho su camino poco transitado. El poeta de nuestro desierto hermano en las llanuras del Tigris y Éufrates , Talib Abdelaziz[1]  dijo con gran sabiduría: Tu olvidas ,pero el viento aún recuerda. La memoria humana es frágil,quebradiza,porosa y más cuando de ser agradecido se trata. La memoria de los vientos y del agua  es perenne.



[1] Basora, 1956

jueves, 6 de junio de 2013

Conspiración






En nuestro desierto el diálogo es el puente entre los seres vivos. No nos extrañe pues que dialoga el perro con la luna o el mar con la playa. Robert Frost[1] dejó anotado que, la lluvia le dijo al viento: Empuja tú que yo azoto-
y tanto hirieron el soto 
que de las flores altivas,
doblegadas pero vivas,
yo sentía el sufrimiento. No nos extrañe observar que el sufrimiento no es fenómeno exclusivo entre  humanos .Sufrimos por la tierra herida, la casa desvencijada, el perrito cojo y la flores azotadas por esa conspiración de la lluvia y el viento.  








[1] R Frost, Arrobamiento.

lunes, 14 de febrero de 2011

Antes de ahogarnos

Hay un tiempo para cada cosa y no está en nuestras manos el pensar, equivocadamente, que somos dueños del tiempo. Si no es así pregúntenle a un viejo si puede hacer cosas que requiere el vigor de los veinte años o a pregúntenle a un joven de veinte si tiene la experiencia de un viejo. De la misma manera sucede con las familias, las empresas humanas y las naciones. Puede ser tarde, cuando queremos enderezar lo que andaba torcido. Dígase de evitar a tiempo el calentamiento global planetario, el envenenamiento de ríos, mares, aires y tierras. Un día como suele sucederme a menudo me visitó un proverbio chino en un libro que me prestaron y recuerdo que dijo esto: Aquel que ya se ahogó no le molesta la lluvia. En lo personal guardo una pequeña hoja de mi libreta personal para recordarme aquello que me espera y bien sé que tiene su tiempo y no el que a mí se me antoja.



viernes, 28 de enero de 2011

Lluvias, Mares

Decimos, llueve a mares.
Decimos, es una mar de arena.

Hoy llueve a mares la arena, en el mar del desierto

la lluvia de arena o de agua es un mar que desciende sobre otro mar

Aquí siempre llueve en la mar del desierto: unas veces arena, otras veces

-pocas- la mar de agua…



viernes, 26 de febrero de 2010

Caída y enredo

La lluvia cae. La lluvia cae arrachada o vertical pero cae. Cae la lluvia y se torna horizontal hasta llegar al mar, siempre horizontal, arrastrándose, fluyendo, lamiendo a la tierra, brincando las piedras. Llover en el desierto. Lluvia de verano. En alguna tarde, en algún aguacero llueve nostalgia y entonces la lluvia se nos enreda en el corazón. La lluvia se torna cabellera y el aire nos trae el aroma de ayer, de otros veranos, convertido en el ahora.