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domingo, 7 de febrero de 2016

Desconocer





Dentro del vasto mundo que desconocemos está la pregunta ¿cuán fuerte soy? ¿cuán valiente, arriesgado y temerario puedo ser?  
Los viejos marinos responden: si quieres saber  cómo remar adéntrate en la mar. 
Unos somos más fuertes y hábiles que otros, es cierto. 
Pero el verdadero  y lamentable asunto es cuando desconocemos de qué somos capaces -sin importar si somos grandes o pequeños . 
Una inscripción popular dijo: “Si los elefantes supieran lo fuertes que son romperían cadenas y saldrían del circo”  frase que provoca un sonrojo interior  pues es un espejo en el que nos vemos -individuos, grupos, naciones, la humanidad entera.

martes, 28 de enero de 2014

Leer, conocer, desconocer




He vivido una escena conmovedora de camino a visitar a un amigo internado en una clínica. Pasé junto a una escuela primaria y pude ver a todo un salón de clase con niños en absoluto silencio absortos en la lectura. Un día anduve así, absorto en mis primeras lecturas de un viaje -que por fortuna sigue con las velas desplegadas-  en una travesía fascinante que aún no llega al puerto. Quien se inicia en la lectura tempranamente puede descubrir un modo particular de contemplar a los demás, al mundo y a la historia  -de manera gradual, casi imperceptible pues la lectura, como el arte, nos cambia. Nuestro querido Jorge Luis anotó, para nosotros, su vivencia de la lectura en los niños:

Las lentas hojas
vuelve un niño
y grave
sueña con vagas cosas
que no sabe.

Leer, curiosamente, es apuntar con una linterna que proyecta su rayo luminoso en la oscuridad …pero queda un inmenso mundo circundante en oscuridad. Por eso, hay mundos y mundos desconocidos que nos esperan.


sábado, 2 de noviembre de 2013

Desconocer y conocer




Los capitanes de barco y de las aeronaves no sólo saben conducir y operar su nave y trazar el rumbo sino que también entienden el funcionamiento y las partes que tiene su nave. Ese conocimiento les ayuda en caso de necesidad y como precaución. Por lo contrario los pasajeros suelen desconocer todo el trabajo y los conocimientos del capitán y se ponen en sus manos con una fe ciega y confiada. En el plano personal sucede algo parecido. Hay gente que vive simplemente pero ignora cómo trazar el rumbo de su vida y seguirlo y como es el funcionamiento correcto de su cuerpo, de su mente y emociones y no sabe qué hacer cuando se levantan las olas de las confusiones y los estados emocionales alterados de su vida. Hay diferentes niveles de ignorancia y de conocimiento ,con resultados diferentes. Por lo dicho es de gran valor que tengamos en alto aprecio el ser sabios conocedores y guiadores de nuestra vida para que esta no se extravíe y llegue a buen puerto junto a las vidas de todos aquellos que más directamente dependen de nosotros. Aunque la verdad es que la humanidad es una sola y todo lo que hagamos pequeño o grande repercute en el conjunto de alguna manera ,tarde o temprano. Una gran ayuda es recordar la sabiduría búdica que dice:Si quieres conocer el pasado, entonces mira tu presente que es el resultado. Si quieres conocer tu futuro mira tu presente que es la causa.


martes, 16 de abril de 2013

Algún día








Una de las  horas mas angustiosas para cualquier padre y madre es perder a uno de sus hijos  momentáneamente  y en consecuencia el reencuentro ilumina de sentido y felicidad  a la vida.  De manera similar, sucede con nosotros mismos. Podemos ir por la vida tan vertidos hacia la exterioridad, extraviados e inmersos en una vida de autómatas hasta llegar a sentir que somos, para nosotros mismos, un territorio desconocido que nos genera un temor y temblor como decía Kierkegaard. Nuestro buen Pablo Neruda viajó mucho por el mundo hasta que un día se detuvo e hizo esta anotación que es un parte aguas en la vida humana: Algún día en cualquier parte , en cualquier lugar ,indefectiblemente te encontrarás a ti mismo y ésa, sólo esa, puede ser  la más feliz o la más amarga de tus horas.