Uno de los gozos de nuestro siglo es contar con orquestas sinfónicas alrededor del mundo.Ellas son grandes naves que surcan los mares .Las orquestas llevan mensajes universales que sólo requieren de un oído para escuchar y la amplitud de nuestros espacios del alma. Es hermoso considerar todo lo que se vive cuando una orquesta termina su presentación y surge, cual tsunami, una ola de aplausos y afecto que la envuelve toda.La orquesta calla y se sumerge en la ola de las gratitudes. ¡Hermosa navegación!. Las grandes naves llevan bienes a puertos grandes y pequeños pero las naves orquesta llevan mensajes de humanidad y esperanza para el mundo que no requiere de una lengua particular ni de saber leer una partitura de...música.
Es una antología de las Cartas del Desierto que trasmito en Radio Universidad 105.3 FM y 1310AM, Chihuahua. Mexico. Una mirada sobre el mundo, la vida y la historia Social desde el desierto Chihuahuense en el Norte de México. Escribo y comparto mis sentires mientras vamos de camino: Si estas Cartas te ayudan y las reproduces, cita al autor y a la fuente. ¡Gracias por escribir tus comentarios¡ -La vida abre la puerta,nosotros hacemos el camino-
lunes, 24 de junio de 2013
domingo, 23 de junio de 2013
Una sola nube
El verano en el desierto es prodigo, generoso en calor y
por otro lado,tremendo,breve,austero en lluvias. Nuestra esperanza ,instrumento
de adivinación popular, y fantasía es la observación constante de las nubes y
sentir de dónde y como sopla el viento. Gozamos con tener y tenemos como gozo a
las nubes en sus variadas formas siendo las veraniegas brillantes, redondas,
abundantes pero igual de veleidosas -cuando uno piensa que descargarán aquí se precipitan
donde el horizonte ya no es nuestro. Pero llega el día gratuito como hoy cuando
las nubes en nuestro cielo se convierten en UNA, grande, hermosa, preñada nube
de agua. Así ,maduro el tiempo y coincidiendo
augurios,anhelos,esperanzas,cálculos y otras operaciones de la mente y del
corazón…sopla, truena y llueve estruendosamente, breve y austeramente y nos
llena de regocijo. Sé que en otras partes del mundo todo lo dicho es innecesario,
pero en estas tierra una gota es una fiesta como la primera gota que llovió en
este desierto ,algún día.
sábado, 22 de junio de 2013
El viento, el agua
Cada 100 años los arroyos en nuestro
desierto rebosan en los meses de lluvia.
Mientras tanto las piedras grandes y pequeñas y los arbustos que crecen en los
lechos saben que un día el agua llegará, porque el agua no olvida, el agua
tiene memoria. Y lo mejor ,como humanos, es no fincar donde las agua han hecho
su camino poco transitado. El poeta de nuestro desierto hermano en las llanuras
del Tigris y Éufrates , Talib Abdelaziz[1]
dijo con gran sabiduría: Tu olvidas ,pero el viento aún recuerda.
La memoria humana es frágil,quebradiza,porosa y más cuando de ser agradecido se
trata. La memoria de los vientos y del agua
es perenne.
viernes, 21 de junio de 2013
Pequeño, pequeñito
El principio de la ciencia comienza por la observación, llegar a la
sabiduría requiere a la observación, navegar en este mundo depende de nuestra
observación. ¿Por qué es tan importante observar? La observación da cuenta de
los cambios y transformaciones por
pequeñas y casi imperceptibles que sean y ahí reside su importancia. Para
comprender el valor incalculable de ser hábiles observadores escuchemos lo que
nos dijo hace once siglos Hazm de Córdoba: “…el incendio en sus comienzos es una chispa.
Todo lo grande empieza por
ser diminuto:
de un huesecillo de nada ves nacer el árbol. El inicio de
todo, siempre diminuto, su desarrollo y evolución nos llevará de la mano para
comprender las consecuencias de todo y cómo es el presente de nuestra realidad personal, comunitaria y planetaria.
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jueves, 20 de junio de 2013
Pastor de estrellas
Hay cielos venturosos en nuestro
mundo para la visión nocturna de las
estrellas. Entre ellos destacan los cielos cordilleranos andinos y los cielos de nuestros desiertos. Unos por
su altura otros por la sequedad del ambiente son propicios para esa ciencia,
arte y placer indescriptible de asomarnos a ese mar cósmico sin orillas. Fue el
doctor Parodi un amigo de mi padre, astrónomo y físico, quien despertó en mí
este gusto por asomarme a nuestros cielos. Cuando me enteré de su partida, no
dudé un segundo en imaginar que su presencia nos acompaña desde esas luces
maravillosas, desde esos fueguitos
como solía decir. El maravilloso poeta árabe Hazm de Córdoba[1]
escribió hace once siglos unas líneas hermosas que son el mejor homenaje para este buen amigo -que habita en ese hermoso reino.
Pastor soy de estrellas, como si
tuviera a mi cargo
apacentar todos los astros fijos y planetas / Las estrellas en la noche son el símbolo
de
los fuegos de amor encendidos en la tiniebla de mi mente /
Parece que soy el
guarda de este jardín verde oscuro del firmamento / Si
Tolomeo viviera, reconocería que soy
docto en espiar el curso de los astros.
[1] Abu Muhammad Alí Ibn Hozm
o Hazm de Córdoba, España 994-1063
dC 2. De "Sobre las señales del amor "
miércoles, 19 de junio de 2013
Mirada
Cuando dos seres humanos se sienten en un
mismo concierto pasan de la palabra a
las señales de los ojos y de la mirada que son una suerte de prodigio
comunicativo. Recuerdo que mi padre nos guió por la vida con la mirada. En el mundo amoroso la mirada
hace todo lo que las palabras no saben y no pueden decir. Viene en mi auxilio
el recuerdo del buen Abu Muhammad Alí Ibn Hozm[1]quien
nos dijo hace muchos siglos en otro amado desierto: Con la mirada se aleja y se atrae, se promete y se amenaza,
se reprende y
se da aliento, se ordena y se veda, se fulmina a los criados, se
previene
contra los espías, se ríe y se llora, se pregunta y se responde,
se concede y se niega.
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